Netflix ha puesto en tela de juicio el modelo de negocio caduco de la industria de Hollywood y las grandes corporaciones harán la guerra.
El efecto de Netflix en la industria del entretenimiento ha echado raíces de manera profunda y significativa en los últimos años. La agitación causada por el ascenso meteórico de la plataforma streaming ha llamado mucho la atención a los grandes magnates de los medios que se reunieron el pasado mes durante su cónclave anual en la Conferencia de Allen & Co. celebrada en Sun Valley (Idaho, Estados Unidos). «Basta con ver el estado de nuestro negocio«, declaró un prominente CEO sin identificar a Variety, con un poco de miedo y de asombro en su voz.
El modelo de negocio de vídeo bajo demanda y streaming directo al consumidor que plica Netflix ha sido el motivo principal por el que Disney y Comcast han perseguido obsesivamente la compra de 21st Century Fox para lanzar su app de Disney Play. Fue, en gran medida, la motivación más significativa a la hora de que AT & T se fusionara con Time Warner. Sin lugar a dudas, ha marcado el cambio más grande en la economía de la industria del entretenimiento en décadas y es una evolución impulsada principalmente por una empresa que lleva apenas seis años en el negocio de los «contenidos originales».
Hollywood dejará que el modelo tradicional se caduque y hará la guerra a Netflix siguiendo el modelo con el que la plataforma streaming ha triunfado
Al trata de ponerse a la altura de Netflix, los conglomerados de medios más grandes de Estados Unidos están empeñados en reinventar parte de sus operaciones para parecer un modelo de negocio directo al consumidor. Los productores de contenido más grandes de la industria pretenden aprovechar la eficiencia y la moda de este tipo de modelo de negocio para llegar como sea a todas las televisiones, los ordenadores, las tablets y los smartphones posibles en Estados Unidos. «Una compañía de medios en la actualidad debe desarrollar relaciones duraderas y directas con el consumidor«, asumió el presidente y CEO de AT & T, Randall Stephenson, a los inversores el mes pasado.
«Creemos que los modelos comerciales clásicos y de venta al por mayor serán realmente difíciles de mantener con el tiempo«. Así pues, los conglomerados de medios tradicionales sienten la urgencia de actuar ahora por temor a que Amazon, Facebook, Apple y Google también estén ocupados elaborando plataformas de contenido global que empequeñecerían sus operaciones. No es de extrañar que Disney, la mayor compañía del mundo, lidere la carrera de esa vieja guardia de Hollywood para ponerse al día con Netflix y, como el propio Bob Iger explicó, lanzar Disney Play se ha convertido ahora en «la mayor prioridad de la empresa para 2019«.