Sigourney Weaver vuelve a la saga de Avatar, pero en esta oportunidad para interpretar un papel totalmente distinto al que tuvo en la primera película. Así se preparó para el reto.
Llegó el momento. Después de 13 años, Avatar estrenó su segunda película. El sentido del agua trae de regreso varios de los elementos principales de la entrega anterior, pero además dará la bienvenida a nuevos personajes, arcos argumentales y términos. James Cameron ha tardado, pero promete cumplirle a la audiencia con esta, su nueva creación.
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A pesar del gran éxito en taquilla de la parte anterior, no fue de manera inmediata que se tomó la decisión de seguir adelante con una secuela. Así, fueron un par de años los que se tomaron los ejecutivos para dar la luz verde necesario. De la misma manera, el cineasta encargado se tomó su tiempo para desarrollar su preciado proyecto.
En 2017 comenzó el rodaje. No obstante, el desarrollador tomó la decisión de filmar la 2 y la 3 a la vez, por lo que hubo retrasos. Los efectos de la pandemia del covid-19 también hicieron parte de las variables que demoraron el estreno.
La posproducción auxiliada por la inteligencia artificial de Weta Studios y el grabar secuencias enteras bajo el agua hicieron de la cinta todo un reto al realizarse.
Sigourney Weaver, quien le dio vida a la doctora Grace Augustine en el largometraje de 2009, también vivió en carne propia uno de los mayores desafíos de la secuela. Resulta que la actriz dejó a un lado su personaje anterior para interpretar a una na’vi desarrollada científicamente en laboratorio llamada Kiri.
Kiri es la hija biológica del cuerpo del avatar de Grace Augustine, quien quedó con muerte cerebral. A pesar de tener un origen de laboratorio, ella es una Na’vi que fue naturalmente concebida y criada en las selvas tropicales de Pandora. Aunque Grace tenía un cuerpo de avatar, Kiri posee rasgos humanos como sus cejas y cinco dedos en sus manos.
Ella es una adolescente de 14 años y Weaver tiene 73, por lo que darle vida fue toda una odisea para esta última. Por eso, la intérprete reveló cómo fue la preparación para el rol.
«Me encanta haber tenido la oportunidad de interpretar a una adolescente real. Es lúcida y está aprendiendo”, dijo primeramente en una entrevista con Digital Spy.
De esta manera, aunque considera que hacer de joven es “un honor”, admitió haberse sentido “entusiasmada, animada y aterrorizada». Por ello, buscó métodos de inmersión para darle movimientos y voz creíbles a su interpretación.
«Por suerte tenía mucho tiempo para prepararme«, tras lo que también agregó: «fui a varias clases de distintos institutos, ahí pude registrar sus voces. Hay muchas diferencias entre los adolescentes de 12 a 15 años”.
No en tanto, más allá de ver a la juventud actual, Sigourney Weaver quería darle su propia identidad a Kiri, por lo que se atrevió a ir más allá. Usó su propia experiencia en la tierna etapa de la vida por la que atravesó hace décadas.
«Una vez visto aquello pensé: ‘vale, puedo dejar que Kiri salga a relucir’. Quien sea que es, combinada con quien fui a los 14. Fue una especie de maraña«, confesó.
«Me dio mucho con lo que trabajar y, en el momento en que llegué a hacerlo, disfruté mucho dejando mi caparazón atrás y convirtiéndome en esa ‘mocosa‘ durante un rato”, concluyó.
Ahora, Avatar: El sentido del agua ya está disponible en los cines de todo el mundo.