Caperucita roja y Cenicienta unen sus fuerzas para investigar un asesinato
Los cuentos de hadas clásicos con, Caperucita roja a la cabeza, siempre intentan seguir con vida y en muchas ocasiones se convierten en nuevos productos. Estos pueden ser más o menos fieles al original o solo beber en parte para crear su propia historia, como es el caso de Once Upon A Crime de Netflix. El título es un juego con la típica frase de apertura de estas historias, “Once Upon a Time” que se suele traducir por “Érase una vez” (en ocasiones como “Érase una vez que se era”), al que se le cambia el “Time” por “Crime”. Curiosamente ya existe una película titulada así, del año 1992 y traducida por “Sólo falta el asesino”.
La que nos ocupa, y como adelanta el trailer, presenta a una adolescente Caperucita Roja que traba amistad con Cenicienta, por supuesto con un príncipe, un baile y un zapatito de cristal. Es más, ambas unen fuerzas para investigar un crimen, un asesinato relacionado con el famoso zapato de Cenicienta. La producción que se estrena el 14 de septiembre adapta la novela Akazukin, Tabi no Tochu de Shitai to Deau de Aito Aoyagi en la que la chica vestida de rojo investiga y resuelve crímenes relacionados con cuentos clásicos.
Otras versiones de clásicos actualizados
A nadie le extrañará si se dice que de funcionar esta película quizá sea la base para una nueva franquicia a explotar, a fin de cuentas los cuentos de hadas han demostrado en el pasado ser muy rentables. Se puede nombrar por ejemplo a Fábulas, versión en cómic que recoge a muchos de los personajes de las fábulas clásicas en el mundo actual y que si bien empezó como una historia única después se puso a volar hasta ser una de las mejores epopeyas del noveno arte.
Otros casos de éxito serían las series Érase una vez o Grimm, de hecho ambas deben mucho a Fábulas. Además de las innumerables películas que Walt Disney ha hecho como adaptaciones, desde Blancanieves y los siete enanitos a La Cenicienta hasta llegar a Frozen: El reino helado o Enredados. Eso sin olvidar obras de culto como El Décimo Reino, La Escuela del Bien y del Mal o la trilogía de Los descendientes (de nuevo de Walt Disney. Aquí con el protagonismo de los hijos de sus más grandes villanos).