Entre las candidatas a Mejor Película en el Festival de Sitges de 2013, Borgman emergió victoriosa. Esto significa que, entre lo extraño, esta cinta se lleva la palma. No es solo mi opinión, sino la de un jurado selecto de valientes profesionales del cine. Aunque los criterios del tribunal son indudablemente sólidos, la pregunta persiste: ¿Realmente merece Borgman este título?
El misterioso inicio de Borgman
Un hombre harapiento se escabulle entre los árboles de un bosque nórdico, perseguido por un cazador, un cura y su ayudante. Esta misteriosa persecución, cuyos motivos pueden escapar al espectador incluso al finalizar la película, es el prólogo del desafiante filme holandés.
Para salvar su vida, el prófugo suplica cobijo a una familia acomodada en la periferia. En el momento en que el enigmático inquilino cruza el umbral de la lujosa casa, comienza Borgman.
El impacto del intruso en la familia
La historia se centra en el impacto que genera la presencia de este supuesto indigente en los miembros de la familia. Con excepción del padre, que siente un profundo desagrado hacia el intruso, el resto de la familia se siente fascinado por él, como si se tratara de un ente mágico o divino.
Esta fascinación despierta en la madre un fuerte e inexplicable deseo sexual. Conforme avanzan los días, el barbudo protagonista va revelando al espectador sus oscuras intenciones.
La mente enrevesada de Alex van Warmerdam
Este trabajo es fruto de la mente enrevesada del director y guionista Alex van Warmerdam, quien pretende exhibir originalidad y profundidad. Sin embargo, aunque la historia tiene elementos singulares, la idea principal no es nueva.
El entramado de sentimientos y emociones que desata el protagonista ya existe en «Teorema» del incomparable Pasolini. La manera en que los protagonistas de ambos filmes atraen y manipulan a quienes los rodean es casi magnética.
La malicia del intruso y la percepción del espectador
Es curioso cómo, a pesar de la palpable malicia de los actos del intruso, el espectador tiende a alinearse con él en lugar de compadecerse de la familia. Esto puede deberse al enfoque estereotipado del director sobre la familia burguesa, ridiculizándolos y generando el deseo en el espectador de que el mendigo les haga la vida imposible.
Algunos espectadores interpretan este aspecto social como el significado principal de la película, viendo la intromisión del mendigo en la casa de la familia rica como una especie de «revolución social». Sin embargo, creo que hay mucho más en juego y que esta es solo una idea de relleno.
Influencias cinematográficas y la originalidad de Borgman
La ridiculización de la clase alta también estaba presente en «Teorema». Además, no podemos ignorar las similitudes de Borgman con la increíble «Viridiana» de Buñuel e incluso con Funny Games de Michael Haneke.
A pesar de estos inconvenientes, la película es totalmente recomendable. Puede que no sea la más rara y original, pero tiene sus méritos. Confío en que este director holandés nos ofrezca grandes quebraderos de cabeza en el futuro.