Meg Ryan dirige Lo que sucede después. Una película romántica sobre dos personas que se reencuentran, y descubren que, haberse quedado estancados en un aeropuerto, tal vez es lo que más necesitaban.
Lo que sucede después es una película que tiene la mezcla perfecta de romance, backstory, y crecimiento personal. Los dos personajes parecen entrar en un universo paralelo durante unas horas, y acaban teniendo una experiencia super bonita donde acaban conociendo más sobre ellos mismos, y sobre la relación que tuvieron.
Es un poco de fantasía, pero de forma muy sutil
Hay unas partes en la película donde los personajes se encuentran perdidos, ya sea dentro del aeropuerto o en sus relaciones, y hay una voz en megafonía que les va guiando hacia donde tienen que ir, e incluso en ocasiones les responde a preguntas. Esto hace que la dinámica sea aún mejor. Porque tanto los personajes como el público se sorprenden al escuchar esta voz en off tan curiosa.
La química entre los protagonistas es innegable
Meg Ryan y David Duchovny interpretan a dos personas de 50 y pico años que se reencuentran camino a Boston y a Austin, en un aeropuerto donde hacen escala. Pero les pilla una tormenta, que empieza a causar que muchos vuelos sean retrasados o cancelados. Y en última instancia, acaban encerrados en el aeropuerto, teniendo fe en que sus vuelos puedan despegar en cualquier momento… Pero no ocurre.
Y ambos se quedan solos en el aeropuerto, completamente aislados mientras todo el mundo parece haber encontrado un hotel cerca del mismo. Y aprovechan para hablar. Entonces ella le hace la pregunta: ¿Te vas de viaje o vas a viajar? De buenas a primeras, parece una pregunta tonta, pero tiene sentido. Ella se refiere al concepto de viaje como un tiempo que te dedicas para encontrarte o simplemente moverte del punto A al punto B. Y esta película es, sin duda, un viaje.
Además, en ningún momento dejas de pensar que no han sido pareja. Se palpa el respeto y el cariño que se tienen, y su amor sobrepasa la pantalla. Es una peli muy tierna.
No es la primera película que dirige Meg Ryan
Ya en 2015, debutó como directora con la película Ithaca, un drama donde también tuvo un papel protagonista, y que no tiene absolutamente nada que ver con este romance contemporáneo. No obtuvo muy buenas críticas, pero eso no hizo que Meg se haya rendido. Esta nueva película tiene mucho mejores críticas y se nota que Meg ha encontrado a su público.
Tal vez no sea la película romántica del año, pero es , sin embargo , una que te va a dejar el corazón blandito, porque trata temas muy del día a dia: aborto, corazones rotos, adolescencia, divorcio, segundas oportunidades… Desde luego, es una peli bonita, aunque peca de ser algo ñoña, pero eso es secundario. Tiene una buena historia y Meg y David han interpretado dos papeles de una forma fantástica. Ha quedado una relación hermosa, al menos en pantalla.
Llega a nuestros cines este 17 de Mayo. Estamos seguros de que os va a sacar más de una sonrisa. ¡Nos leemos!