Netflix lo ha vuelto a hacer. El estreno de ‘Altered Carbon’ ha arrasado con el panorama audiovisual y televisivo, entregándonos una serie de ciencia ficción perfecta y regalándonos una historia inolvidable.
Lo veníamos avisando por activa y por pasiva: ‘Altered Carbon‘ iba a arrasar con todo, Netflix lo iba a volver a hacer y su nueva serie se iba a convertir en el primer gran éxito de 2018. Así ha sido. Cero sorpresas. El juego de siempre con los mismos participantes. Pero, esta vez, con una historia de ciencia ficción al más puro estilo ‘Blade Runner’. Aunque, ¿qué debes saber antes de ver la nueva serie de Netflix que ya está disponible en el catálogo de la plataforma streaming? Esta es la sinopsis oficial:
«La serie se desarrolla en medio del siglo XXV, una época en la que las personas ya no mueren, técnicamente, sino que sus mentes y consciencias son transferidas de un cuerpo a otro… Adaptación de la novela de Richard K. Morgan que se centra en la historia de Takeshi Kovacs (Joel Kinnaman), un detective que se ve envuelto en una enorme conspiración, 500 años en el futuro, en medio de un mundo cyberpunk«.
Os dejamos también el tráiler, para que le echéis un vistazo y lo catéis:
Netflix ha venido a pasarse al mainstream con ‘Altered Carbon’, que explota el interés por la ciencia ficción a lomos del caballo de ‘Blade Runner 2049’.
‘Altered Carbon‘ es una serie de televisión que viene a hacer historia. Netflix siempre ha sido consciente de lo que es el mainstream y cómo explotarlo. A veces crea el mainstream, como es el caso de ‘Stranger Things‘ y la nostalgia por los años 80. Y otras coge el tren de la actualidad para arrastrar a los viajeros a su parada y no sacarlos de su plataforma. Es el caso de ‘Altered Carbon‘, que viene a jugar con las reglas de juego de ‘Blade Runner‘ ahora que ‘Blade Runner 2049‘ ha salido a la luz, después de tantísimos años de espera. Y lo mismo con ‘Mute‘, película de Netflix que está a punto de estrenarse este mes. Una táctica maestra en lo que a aprovechar la oportunidad se refiere. Pero es que ‘Altered Carbon‘ ha venido, directamente, a pasarse el mainstream.
La serie, protagonizada por un Joel Kinnaman solitario, torturado y oscuro, propone un argumento tan simple como el de un caso de espionaje. La típica historia de detectives donde lo realmente importante no es el caso, sino el contexto que gira en torno al protagonista. Este se nos va dibujando a través de flashbacks que, a su vez, sostienen la tensión cercana a la esquizofrenia de un Takeshi Kovacs ya inolvidable. Un personaje con el que viajamos por un mundo cyberpunk que parece muy avanzado, pero que es igual de asqueroso y repugnante que el actual. Todo gracias a una fotografía que hace pensar que ‘Akira‘, si sucede en acción real, debería contar con la producción de Netflix.
El alma de la máquina no está en ‘Altered Carbon’, pero la profundidad de la original ‘Ghost in the Shell’ pervive en el fondo de un guion muy inteligente que, junto a la fotografía, los diseños de producción y el reparto, convierten a la serie en un rotundo exitazo para Netflix.
Como buena obra de ciencia ficción, ‘Altered Carbon‘ tiene su propio y particular funcionamiento. Incluso un extraño vocabulario repleto de terminologías y neologismos que vamos descubriendo conforme avanza la serie. Y, como buena obra de ciencia ficción, ‘Altered Carbon‘ propone una serie de preguntas y respuestas sobre inquietudes existenciales que reabren el debate sobre la vida y la muerte, el cuerpo y el alma, la esencia y la existencia. ‘Ghost in the Shell‘ a distintas y sin alma de la máquina. Todo un entramado laberinto de cuestiones sobre las que el guion rota sin necesidad de evadirnos de lo que verdaderamente importa: la historia principal.
Una historia en la que la tensión con personajes como el de Renee Goldsberry o Martha Higareda abren arcos argumentales de baja frecuencia que son como misiones secundarias en videojuegos de mundos abiertos: parece que no tienen una trascendencia abismal, pero fortalecen al protagonista y lo hacen moverse en entornos interesantes. La tensión sexual más que evidente entre Joel Kinnaman y Martha Higareda es un punto a favor para la serie, la hace crecer y volverse más grande. La hace real, casi tangible. Todo un acierto de reparto que, unido a la dirección de fotografía, a los diseños de producción y a un guion muy inteligente convierten ‘Altered Carbon’ en el primer gran éxito del año para Netflix y, probablemente, para la televisión.