Con amor, Simon es la visión “aceptable” de la América blanca y tolerante de lo que es ser homosexual.
Lo que nos dice la película ‘Con amor, Simon’ es que está bien ser homosexual siempre que seas blanco, atractivo y nada amanerado. En varias ocasiones se pone de manifiesto que tener mucha pluma no es cool, incluso tenemos al gay amanerado (hasta el punto de no ser creíble) del que se hacen chistes para que todos nos riamos un poco de él. Porque una cosa es ser gay y otra cosa ser demasiado gay. Una muestra de la estrechez de miras de una Norteamérica que avanza despacio hacia la integración real. Sin embargo hay que reconocer que todo esfuerzo y apoyo es poco para las minorías oprimidas en nuestra sociedad. Hay que aplaudir el intento, sobre todo viniendo de un estudio de Hollywood, ya era hora de que desde los grandes estudios se traten estos temas en vez de esconderlos debajo de la alfombra como hasta ahora.
Lo peor de ‘Con amor, Simon’ es esa visión de la juventud interpretada por adultos y que se comportan como adultos, hablan como adultos y tienen más ingenio que Lope de Vega en sus réplicas. Supongo que esta versión ideal de la juventud es la forma que tienen los guionistas de tomarse su revancha de sus años de instituto en los que estábamos llenos de hormonas y acné, no nos comíamos un colín y por supuesto nos comportamos como capullos. Aquí los protagonistas son lo más de lo más: listos hasta el punto de ser brillantes, siempre con una réplica ingeniosa en la boca, y sobre todo son diferentes al resto de compañeros que son tontos y no molan tanto como nuestros protagonistas, ellos son especiales frente al borreguismo juvenil con el que no comulgan. Por supuesto el prota tiene el gusto musical de un hipster de 40 años. Todo esto recuerda a esa juventud irreal que vimos en “Las ventajas de ser un marginado”, aunque por lo menos ellos tenían a Emma Stone.
La película trata de emocionar buscando la lágrima fácil pero a veces consigue sacarte los colores y reír con algunas secuencias bien trabajadas. Si esta película sirve para ayudar a que la gente acepte la homosexualidad con normalidad y a los jóvenes que por culpa de nuestra sociedad no se atreven a reconocer abiertamente su condición sexual, entonces hay que reconocer que la película ha logrado un objetivo muy importante.