Timadoras Compulsivas es el remake de Un par de seductores; dirigida por Chris Addison y protagonizada por Anne Hathaway y Rebel Wilson
Dos artistas del engaño, una de clase alta y la otra de los barrios bajos, deciden unirse para timar a los hombres. En Timadoras compulsivas, tenemos un remake que nadie ha solicitado, que nadie quería y que, en cambio se ha producido.
La película cuenta con un reparto bastante bueno, Anne Hathaway viene del mundo de los timos tras protagonizar el año pasado Ocean’8 y Rebel Wilson es uno de los grandes rostros del mundo de la comedia. Pero el guion simple y torpe hace que ninguna de las dos se pueda lucir; siendo imposible sacarles partido. Siendo así Timadoras Compulsivas un desperdicio.
Timadoras Compulsivas es una película que desaprovecha absolutamente todo, tanto como el reparto como la película original. Convirtiéndola en algo simple que llega a aburrir y que se complica horrores para llegar al clímax final. Es una película que además de simple es cutre, haciendo que Hathaway y Wilson parezcan idiotas y primerizas en pantalla. Cierto es que la película logra ir de más a menos; empieza como una gran película, con personajes que parecen inteligentes, ocurrentes; pero que se desinfla en cuanto empiezan a aparecer los chistes fofos y socarrones de turno para hacer reír a todos, pero que, paradójicamente no tiene gracia alguna.
Un guion horrible
El guion es una complicación por sí solo; hay muchos enredos y usa una fórmula más que repetida en el cine, pero que sigue sin causar efecto. La película es una contradicción ya que busca la moraleja de que cada uno esté a gusto con su cuerpo, pero adivinad quién es la bruta y torpe. Os doy una pista: no es Anne Hathaway. Es una película que necesitaba más potencial y que nunca terminó de arrancar. Morirá en el olvido.
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