Ya hemos podido ver ‘Okja’ y… Nos ha dejado sin palabras. O casi. Esto es lo que podéis esperar de la mejor película original de Netflix.
Llegó el día de ‘Okja‘. La película original de Netflix que levantó tanto revuelo en el Festival de Cannes de 2017. Y por la que Christopher Nolan, el director de ‘Dunkirk‘, criticó a la plataforma de streaming más consumida del planeta. Cuando llega el momento de ver una película que ha suscitado tantos comentarios en redes sociales siempre es conveniente mirarlo desde una perspectiva lo más límpida posible. Casi virginal, aunque a veces sea prácticamente imposible de lograr. Pero ‘Okja‘ tiene tanta sinceridad desde el primer fotograma que pronto olvidas lo que hay detrás. Y, simplemente, te dejas llevar. Llevar por una conmovedora historia que tiene tantos puntos de vista como los del debate que originó en Cannes.
‘Okja’ podría ser la arquetípica historia de la amistad entre un hombre y un animal. Y trasladar el manido mensaje de que hay que dar la mano también a lo que no conocemos. Pero no es así. La cinta de Bong Joon-ho, la mejor de Netflix hasta la fecha, destaca por la dolorosa sinceridad que desprende y el magnífico baile de géneros que intenta evadir, a través de un mensaje ecológico, la durísima lectura sobre el Holocausto frente al corporativismo Nazi.
‘Okja‘ podría ser, simplemente, la típica historia de amistad entre un hombre y un animal. Lo hemos visto otras veces. Ya sea de una forma arquetípica que raya la vergüenza como ‘Mi gran amigo Joe‘ (1998). O con una narrativa dramática, épica y fantástica como la que nos regaló Fumito Ueda en el infravalorado ‘The Last Guardian‘. Porque ‘Okja‘ no se viste absolutamente de nada. Simplemente es. Y si te duele lo que estás viendo es por lo sincera que resulta. Porque, a pesar de que la protagonista posee un supercerdo (animal que no existe, desde luego), eres capaz de sentirte identificado desde el primer maldito segundo que ves a Mija (Ahn Seo Hyun) acariciar a su amigo.
Es curioso como Bong Joon-ho (‘Rompenieves’) ubica un drama tan profundo y doloroso como ‘Okja‘ en un cóctel molotov de géneros que no pegan ni con lupa. Pero, ¿cómo puedes mantener la conexión con la historia si no sabes en qué momento la acción ha pasado a la comedia absurda y, de repente, a una tristeza absoluta que raya el paroxismo? Porque, simplemente, sucede. En esta película original de Netflix, la mejor hasta la fecha, Joon-ho te regala un vals cinematográfico con una historia de amistad en la que se puede encontrar un peligroso trasfondo hitleriano. Una triste representación del Holocausto judío en la figura de los supercerdos frente al nazismo corporativo de Mirando Corporation, encabezado por una pragmática y resolutiva Tilda Swinton (‘Doctor Strange’). Por cierto, es realmente divertido ver a Jake Gyllenhaal (‘Brokeback Mountain’) tan sobreactuado. Pero es porque su personaje es así. Y realmente funciona.
Resumen final:
Desde luego, la lectura más simple sería la del mensaje ecológico. Una crítica feroz y sin tapujos a la industria alimenticia. En algunos momentos, ‘Okja‘ es tan sincera que duele sólo de verla. Pero, sin lugar a dudas, y aunque el final no sea lo más dulce que uno haya podido ver, esta cinta es una obra muy disfrutable y recomendable. Incluso puede cambiar tu mentalidad y tu comportamiento para con la fauna que te rodea.