“Super bien hecho”: el thriller ganador del Oscar de Natalie Portman con un 85% de RT recibe críticas entusiastas 14 años después de su estreno
El thriller de 2010 El cisne negro, protagonizado por Natalie Portman, recibe elogios por su uso inteligente de efectos generados por computadora. Dirigida por Darren Aronofsky, la película sobre la bailarina Nina Sayers que pierde el control de la realidad en medio de la presión de competir por los papeles duales de los cisnes blanco y negro en El lago de los cisnes fue un éxito tanto entre los críticos como entre el público en el momento de su estreno. Las imágenes utilizadas para transmitir el desenlace de Nina dejan una impresión duradera, y los efectos visuales que lo hicieron posible han impresionado a los profesionales 14 años después.
En su última entrega de la serie de reacciones de efectos visuales, los miembros de Corridor Crew, Sam Gorski, Wren Weichman y Jordan Allen, hablan sobre una escena en la que Nina (Portman) mira su propio reflejo mientras está parada entre dos espejos. En lugar de los infinitos reflejos que uno vería normalmente, uno de los reflejos de Nina se rasca el hombro y luego se da vuelta para mirarla. Después de un tiempo de adivinar cómo se hizo, Allen pasó a analizar la toma y lo que la hizo más desafiante:
«Están filmando desde detrás de un espejo recíproco, y luego, para el elemento de ella en el reflejo, que se filma en una pantalla verde, están haciendo coincidir la luz. El mismo movimiento de cámara, pero, curiosamente, es solo un movimiento de cámara estimado… Como no es control de movimiento, lo que significa que ambos movimientos de cámara son idénticos, el compositor tiene que estabilizar una toma y luego seguirla en la toma original. Mezclan solo el hombro derecho de su brazo después de que se completa la interacción con la mujer, lo que es una excelente manera sutil de presentarlo, y luego usan el movimiento de la cabeza para hacer la transición… Muy bien hecho».
Lo que los efectos visuales significaron para El Cisne Negro
En el momento de su estreno, El Cisne Negro recibió casi 200 nominaciones a premios, incluida una nominación a los premios BAFTA a los mejores efectos visuales. Los efectos visuales estuvieron a cargo de Look Effects, Inc. y estuvieron a cargo del supervisor de efectos visuales Dan Schrecker. Schrecker, que estudió cine con Aronofsky, ayudó a elevar la película y a mejorar aún más el thriller psicológico.
Aunque algunas de las 250 tomas de efectos visuales de la película, como la transformación de Nina en un cisne negro real en el escenario en el final de Cisne negro, son muy prominentes, muchas son sutiles, si es que se notan. Esta solidez es crucial para el efecto general de la película, ya que el público experimenta la ruptura de Nina con la realidad desde su perspectiva, y sus alucinaciones tienen que desarrollarse como si fueran reales. El enfoque de los efectos visuales permitió que el público realmente creyera en el mundo que se estaba presentando, incluso cuando las imágenes se volvían imposibles.
