La falta de sueño y los problemas derivados del insomnio han sido elementos narrativos bastante utilizados a la hora de crear personajes muy atractivos y sugerentes en el cine, como es el caso de películas tan icónicas como ‘El club de la lucha’ (David Fincher, 1999) o ‘Taxi Driver’ (Martin Scorsese, 1976).
«El sueño de la razón produce ficciones«. Lo dijo Goya, quien poco después acabó convirtiendo su vida y su obra en una pesadilla muy real. «El sueño de la razón produce obras maestras«. Lo dijo Beroy, quien poco después desapareció del panorama del Noveno Arte después de cincelar el abismo de su alma a base de mitos, creencias mefistofélicas y paraciencia. Lo cierto es que hay muchos casos de insomnio y falta de sueño en el Séptimo Arte.
‘Taxi Driver‘ y ‘El club de la lucha‘ son ejemplos drásticos de lo que puede provocar la falta de sueño.
¿Quién no recuerda a Travis Bickle en ‘Taxi Driver’ (Martin Scorsese, 1976)? Robert De Niro inmortalizó en la gran pantalla a un personaje con problemas de sueño (insomnio crónico) después de su paso por Vietnam. Pero no es el único… ¿O tampoco recuerdas a Edward Norton en ‘El club de la lucha’ (David Fincher, 1999), perdiendo el juicio por culpa del insomnio y llegando a inventar a un álter ego denominado Tyler Durden (Brad Pitt)?
‘Insomnio‘ y ‘El maquinista‘ se aproximan más o menos a una versión realista de los problemas derivados del insomnio.
Los problemas derivados del sueño son muchos y pueden llegar a ser peligrosos para el ser humano. Existen muchos remedios para combatir el insomnio, como nos ha enseñado el cine. ‘Insomnio’ (Christopher Nolan, 2002) le dio una vuelta de tuerca a este concepto, pero dos años después ‘El maquinista’ (Brad Anderson, 2004) nos enseñó lo que la falta de sueño podría provocar en un ser humano. Trevor Reznik (Christian Bale) padece un trastorno muy grave de insomnio que le provoca terribles alucinaciones, deteriorando su salud mental a la par que su estado físico.
Pero, ¿qué soluciones hay a parte de convertirse en un sociópata asesino, montar un club de peleas clandestino y dejar que tu cuerpo se consuma, así como otros muchos remedios que el cine ha ido desarrollando a lo largo de su corta historia? Esta podría ser una posible solución: