Sin duda, uno de los grandes fracasos cinematográficos de 2024 es la adaptación de Borderlands y ahora el director Eli Roth reacciona a lo que sucedió en el rodaje.
El año 2024 será recordado por una serie de altibajos en la industria cinematográfica, pero pocos fracasos han sido tan impactantes como el de Borderlands. La esperada adaptación del popular videojuego de Gearbox Software, dirigida inicialmente por Eli Roth, se convirtió en uno de los mayores descalabros tanto críticos como comerciales del año, dejando una marca negativa en la trayectoria de Lionsgate.
Desde su estreno, Borderlands enfrentó un camino difícil. Con un presupuesto de producción de 115 millones de dólares y una campaña de marketing que ascendió a 30 millones, las expectativas eran altas. Sin embargo, la película recaudó apenas 9 millones en su primer fin de semana en cines y terminó su recorrido con un decepcionante total de 32 millones en taquilla a nivel mundial. A esto se sumaron las ventas digitales, que tampoco lograron mitigar las pérdidas, estimadas en más de 114 millones para Lionsgate.
Este tropiezo financiero se vio agravado por la pésima recepción crítica. En Rotten Tomatoes, la película recibió una puntuación abismal del 10%, con un consenso que describía la cinta como un desastre en todos los aspectos. Por su parte, los espectadores no fueron mucho más indulgentes, otorgándole un modesto 51%, apenas suficiente para evitar la etiqueta de desastre total.
Problemas detrás de cámaras.
El proceso de producción de Borderlands estuvo plagado de dificultades. Según se informa, Eli Roth enfrentó diferencias creativas con el estudio, lo que llevó a que el director de Deadpool, Tim Miller, tomara las riendas durante las re-grabaciones. Aunque los detalles sobre la extensión de estas reshoots no se han esclarecido por completo, está claro que no fueron suficientes para salvar el proyecto.
En una reciente entrevista con IndieWire, Eli Roth habló brevemente sobre su experiencia en la película, describiéndola como un proyecto lleno de complicaciones debido a la pandemia: «Hacer eso en COVID fue como… Podría escribir un libro sobre eso». Aunque el contexto de la pandemia ciertamente presentó desafíos únicos, muchos seguidores de la franquicia argumentan que los cambios drásticos realizados a la esencia del videojuego fueron el mayor obstáculo para su éxito.
Lionsgate, en una crisis de margen.
El fracaso de Borderlands no solo golpeó a sus creadores, sino que también sacudió las finanzas de Lionsgate. El CEO de la compañía, Jon Feltheimer, fue claro al señalar que la película quedó atrapada en una tormenta perfecta de problemas: «Todo lo que podía salir mal, salió mal. Se quedó en pausa demasiado tiempo durante la pandemia, y los reshoots, junto con el aumento de las tasas de interés, la sacaron de nuestro modelo financiero seguro».
Además, Feltheimer admitió que varios lanzamientos recientes de Lionsgate, como The Ministry of Ungentlemanly Warfare, The Crow y Never Let Go, no cumplieron con las expectativas. Esto deja en evidencia un año complicado para el estudio, que enfrenta un mercado con márgenes de error cada vez más reducidos.
¿Qué salió mal con Borderlands?
Para los seguidores de la franquicia, la película de Borderlands representaba una oportunidad de ver su amado universo cobrar vida en la gran pantalla. Sin embargo, los cambios realizados a la historia y los personajes, así como la falta de fidelidad al material original, resultaron ser factores determinantes en el rechazo tanto de críticos como de fanáticos.
A pesar de contar con un elenco estelar que incluía a Cate Blanchett, Kevin Hart, Jack Black y Jamie Lee Curtis, la película no logró capturar la esencia que hizo del videojuego un éxito. En última instancia, Borderlands se convierte en un caso de estudio sobre cómo la falta de coherencia creativa y la desconexión con la base de fanáticos pueden convertir un proyecto prometedor en un desastre cinematográfico.
¿Será posible que futuras adaptaciones de videojuegos aprendan de los errores de Borderlands? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: 2024 no será un año que Lionsgate ni los involucrados en esta película deseen repetir.