No es bueno todo lo que trae la nostalgia.
Dicen unos libros que venden mucho que ya no hay nostalgias igual a las de antes. Es cierto. ¡¡¡Menos mal!! Que la nostalgia es muy mala y engaña mucho, demasiado. Nos hace pensar que realmente cualquier tiempo pasado fue mejor y esto no es cierto, no siempre al menos y en muchos casos es una cochina mentira. Un ejemplo con un tema muy sencillo, o con dos. Mejor tres. La música, el cine y las series de televisión.
¿O solo yo he escuchado eso de “es que antes las series eran mejores”? No hay que olvidar el “el cine ya no es como antes” y “la música de los sesenta (o la década de turno) sí que era buena”.
¡¡¡Basta ya!!!
Que tú recuerdes eso no quiere decir, ni de lejos, que sea cierto. Hubo grandes películas antes de ahora (que tocaría especificar qué antes, que es todo muy difuso) por ejemplo Regreso al Futuro, Tiburón o La cuadrilla de los once, es totalmente cierto, y que son de décadas diferentes es igual de cierto. Más todavía lo es que en los años recientes (y uso recientes de forma muy laxa) se han seguido haciendo grandes películas que perdurarán en la memoria colectiva. Lo siento, no es que la saga del niño mago Harry Potter sea peor que otras juveniles, es que nos pillo (vamos a reconocerlo) siendo ya bastante poco juveniles. Éramos mayores, es así.
Lo mismo pasa con las series de televisión y no digamos cuando alguien dice la locura de que las de dibujos de antes sí que molaban. Para empezar recordemos el largo tiempo de emisión que tienen Los Simpson, Padre de Familia que de nueva ya tiene poco y venga ya, si alguien me dice que Los Fruittis eran mejores que Ben 10 es que está muy perdido. Mofli, el último koala era y sigue siendo una joya, pero que alguien me diga que Kim Possible o La patrulla canina no son maravillosas.
¿Y la música? Recuerdo que mi padre siempre comentaba sobre este tema que no es que las de tal o cual década fueran mejores, es que solo tienden a popular las buenas o populares. Lo que no cala, lo que no gusta, lo que pasa desapercibido sencillamente desaparece en el tiempo.
La nostalgia nos hace pensar, por algún motivo inexplicable, que una época en la que apenas teníamos acceso a material de ningún tipo, cuando las películas llegaban con cuenta gotas, las series las justitas (y no siempre bien), música la que ponían en los 40 y poco más, la nostalgia nos hace que pensemos que era mejor. Mejor que un momento en el que podemos acceder a un gran número de contenidos, un momento en el que gracias a Netflix estamos surtidos de lo mejor de las series, en que podemos ver Capitán América: Civil War en versión original en el cine o con doblaje además de en unos meses comprarla en DVD o alquilarla en digital y verla en nuestro proyector.
Una era de maravillas así os lo digo y más en lo que a cultura (y a subcultura) se refiere. Ahora un joven puede hacer canciones en su casa y llegar a todo el mundo, tú puedes leer este artículo en el metro o en tu casa y sería un largo suma y sigue que permite que creadores de todas partes se hagan un hueco cuando antes habrían caído en el olvido.
Ya no hay nostalgias igual que las de antes. Demos gracias al cielo.
