Hoy llega a los cines INVASOR, el nuevo trabajo de Daniel Calparsoro (Salto al vacío, Guerreros), y por ese motivo aprovechamos la ocasión para hablar con el cineasta con el que hemos podido coincidir con el en dos ocasiones, la primera con nuestro compañero Eduardo Quintana que pudo visitar el set de rodaje de la próxima película de Calparsoro, Combustión, y la segunda, un servidor pudo hablar con él hace unos días.
Daniel Calparsoro. Nace el 1968 en Barcelona. A los pocos meses se trasladó con su familia a San Sebastián. Compaginó sus estudios de cine con los de ciencias políticas en Madrid. Su formación cinematográfica la realizó en Nueva York, donde consigue una beca para estudiar Bellas Artes en el Instituto Prat de Brooklyn y más tarde cursa sus estudios de cine en la Universidad de Nueva York.
En Nueva York realiza el corto «W.C.» con el cual recibe numerosos premios. En 1995 dirige su primer largometraje, «Salto al vacío», con el cual se da a conocer, un film personal , que comienza a rodar sin apenas presupuesto pero que le valió al joven director varios importantes premios, además de participar en la sección Panorama del Festival de Berlin. Con “Pasajes”, producido por Pedro Almodóvar, Daniel Calparsoro se consagra como uno de los directores españoles con proyección internacional más interesantes, participando en la Quincena de Nuevos Realizadores del festival de Cannes.
A continuación dirige “A ciegas” (1997) con la que participa en la Sección Oficial del Festival de Venecia, y posteriormente “Asfalto” (1999), “Guerreros”, (2001) y “Ausentes” (2005).
El cineasta Daniel Calparsoro es uno de los directores más personales de nuestro cine. Ha plasmado de manera brillante la violencia y la marginalidad en la gran pantalla, con un discurso narrativo que impone pasión y emoción en sus películas.
Actualmente se encuentra rodando su octavo largometraje “Combustión” también protagonizado por Alberto Ammann.
Cinemascomics: Hola Daniel un placer hablar contigo. Háblanos de INVASOR, cómo llegaste al proyecto y que es lo que más te atrajo de él.
Básicamente fue una oferta que me hizo Emma Lustres, me presentó una novela que se llama INVASOR, de Fernando Marías, con un guión ya escrito y yo llevaba un tiempo buscando un proyecto para volver al cine, y este reunía las dos cualidades que andaba buscando, la primera era que tenía un contenido muy interesante y la segunda que con esa novela que realmente más una película de posesión, tenebrosa y casi de terror, se podía hacer un thriller de acción, esa fue mi propuesta a los productores, intentar hacer un thriller de acción espectacular, aunque tuviéramos unos medios un poco limitados pero esforzarnos en dedicarle el dinero a las secuencias de acción, a los productores les gustó la idea y entraron
Cuéntanos que es lo que se van a encontrar los espectadores cuando vean INVASOR.
Al final estoy muy orgulloso de la película, creo que es trepidante, tiene un ritmo buenísimo, los actores Alberto Ammann, Antonio de Latorre, Karra Elejalde, Inma Cuesta están realmente bien, creo que es una película de género que te engancha desde el principio y no te suelta hasta el final y además consigue un objetivo que es plantear un dilema, que es lo que queríamos, plantear el dilema de ¿Qué harías tú? si tu descubres que hay algo terrible en tu entorno ¿lo sacarías a la luz?¿te arriesgarías a perder tu trabajo para sacarlo a la luz o te callarias? incluso, ¿aceptarías un soborno para no decirlo? y eso es lo que pretende la película y esa es un poco la historia de INVASOR.
INVASOR” está basada en la obra homónima de Fernando Marías. Cómo ha sido la adaptación de la novela y cuanto ha cambiado de la misma.
Cómo te decía la novela y la película en forma no tienen nada que ver, solo se parecen en el contenido o sea que ha cambiado radicalmente.
Parte del rodaje se realizó en Canarias, cómo fue convertir las islas en un perfecto escenario Iraquí y cuanto de complicado fue el rodaje.
La idea era rodar a Jordania, pero con los estallidos de la primavera árabe, no había compañías de seguros que nos aseguraran, entonces optamos por ir a Canarias y recrearlo entre la isla de Fuerteventura y Lanzarote, el rodaje ahí ha sido muy agradable, muy bien, están en una latitud muy similar, tienen unos desiertos realmente espectaculares, lo que hemos tenido que hacer luego es un trabajo digital de añadido y un gran trabajo de producción, pero vamos que funciona muy bien en la película.
Fue muy difícil encontrar a los actores ideales para protagonizar el film.
No, fue un proceso normal de casting.
Ahora estas en la recta final Combustion, rodaje que el equipo de cinemascomics pudo visitar recientemente y vuelves a contar con Alberto Ammann, puede decirse que Ammann puede convertirse en lo que Johnny Depp a Tim Burton?
(Risas) No hombre, no, ya me gustaría a mi ser Tim Burton. No lo se el tiempo lo dirá .
Se esta hablando de Combustión como la versión española de A todo gas, ¿Qué hay de cierto en eso?
Muy poco de cierto. La gran diferencia entre A todo gas y Combustión es la historia. Nosotros nos basamos en la historia exclusivamente, es una historia de amor a tres bandas, de engaños y traiciones, donde los coches aparecen y desaparecen. Hay carreras de coches, pero no es el aspecto fundamental de la película.
¿Cómo nace Combustión?
Nace de una llamada que me hace el productor Francisco Ramos y me lo ofrece directamente. Cuadramos fechas, me enseña el texto, que hubo que trabajarlo bastante, pero había una idea que me gusto mucho. Me gusto el titulo y la idea de hacer una película sobre gente que vive el presente, que no esta haciendo nada en base a lo que le gusta. De alguna manera son gente muy amoral. Hemos trabajado el guión para que haya traiciones, engaños, robos, donde al final lo único que cuenta es la adrenalina. Eso me pareció muy interesante para hacer una película.
¿Cual es el futuro del cine español?
Habría que hacer películas como Lo imposible, que son las que llenan las salas. Pero a mi me gustaría que las películas que llenaran las salas, además de las de Torrente que están muy bien, fueran con actores españoles, porque aunque Lo imposible es muy española, ves el cartel y las imágenes, y los actores son de Hollywood. Lo ideal seria que el público enganchara con nuestro plantel. Hay películas actuales que lo hacen, como Tengo ganas de ti, o películas de animación como Las aventuras de Tadeo Jones. Yo creo que básicamente lo que hay que hacer es un cine entretenido que pueda conectar con el público, que a la gente le interese y le resulte atractivo.
¿Qué queda en tu cine actual del Daniel Calparsoro independiente de títulos como Salto al vacío?
No se. El apellido quizá. (Risas). Igual algún día vuelvo hacer esas películas. De alguna manera vas con lo que puedes, y cuando puedes levantar tus proyectos los levantas, cuando no puedes, no los levantas, y cuando te ofrecen proyectos interesantes te embarcas en ellos. Son etapas distintas. No creo que sean evolución o involuciones, sino que son partes del camino. El camino lo vas haciendo al andar y te va llevando a distintos lugares.
Gracias a nuestro compañero Nacho Estrada por las transcripción
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