Hablamos con uno de los protagonistas de Juego de Tronos.
Juego de Tronos es una de las series de más éxito de la actualidad. Algunos de los personajes que ya hemos podido ver reaparecer en la recién estrenada sexta temporada de ‘Juego de tronos’ es al fiel escudero de Brienne de Tarth, Podrick Payne, personaje interpretado por el actor Daniel Portman que nos habla en la siguiente entrevista acerca de la evolución de Pod, su relación con Gwendoline Christie, y de como le gustaría que acabase el personaje ahora que la serie ha tomado un rumbo distinto a los libros de George R.R. Martin.
¿Cómo comienza la temporada 6 de Juego de Tronos para Pod?
La última vez que vemos a Brienne y a Pod en la temporada 5, Brienne está sufriendo una crisis de conciencia, o algo así. Siente que hay dos cosas que debe hacer, y decide hacer una en lugar de la otra. Al final de la temporada nos marchamos, según parece, a luchar. Y abrimos la temporada 6 a las afueras de Invernalia, entre la nieve. Evidentemente, el invierno ha llegado al Norte. Brienne encuentra a Sansa, y es un gran momento, un éxito personal para ella, porque lleva muchísimo tiempo buscando a las chicas Stark, y muchas veces había estado a punto de encontrarlas, sin lograrlo. En esencia, nuestra búsqueda ha dado un giro, porque ya no buscamos a Sansa, la hemos encontrado. Ahora estamos haciendo todo lo posible por ayudarla, protegerla y colaborar en su restauración, y por emplear la influencia y el poder que posee en el Norte para hacer daño y realizar ciertos movimientos políticos.
Además, Pod mata a alguien. ¿En esta temporada sale de su concha?
En realidad, es la segunda persona a la que mata, pero sí. Creo que existe la idea errónea de que, como no habla mucho, Pod es estúpido. Nunca ha sido así, siempre ha sido muy bueno en lo suyo, y muy inteligente. Y ha encontrado una buena profesora de esgrima, alguien que le ha enseñado a luchar, en Brienne. Él trabajó en Desembarco del Rey durante algún tiempo, y lleva un par de años viajando, y eso influye en un joven. Duermes al aire libre, y hay momentos en los que es tu vida o la del otro. Así que a lo largo de la serie va haciéndose un hombre, ya no es un adolescente torpe y sin confianza en sí mismo. Y ha sido magnífico tener esta oportunidad, porque cuando empecé en la serie tenía diecinueve años, y ahora tengo veinticuatro, así que a mí me ha pasado un poco lo mismo: es mi reflejo.
¿Cómo te llevas con Gwendoline de Juego de Tronos?
Nos llevamos de maravilla. ¡Pero es que es muy difícil no llevarse bien con Gwendoline! Es una persona estupenda, y hace que trabajar sea muy fácil. Tenemos muy buena química, tanto en escena como fuera de ella. Podemos hablar de muchas cosas distintas, pero los dos sabemos cuándo toca trabajar, y cuándo podemos hacer el gamberro y reírnos. Ella tiene un corazón enorme, y una gran personalidad, muy contagiosa. Y por supuesto es una gran actriz, así que no podría estar con nadie mejor ahora mismo.
¿Cómo afecta a la relación entre Brienne y Pod la llegada al grupo de Sansa?
Por supuesto va a ser distinta. Brienne se pondrá en modo “guardaespaldas” siempre que Sansa esté cerca; ya no estarán sólo ella y Pod. Así que habrá diferencias, pero creo que Pod entiende cuál es su sitio en esta situación, por todo lo que aprendió en Desembarco del Rey y con Tyrion. Yo siempre he pensado que Podrick sentía cierta debilidad por Sansa, porque veía cómo la trataban. Así que creo que sentirá alivio de que ahora esté en buenas manos, sana y salva. Más adelante, ocurren cosas que hace que no seamos un trío, sino tal vez más. Así que ha sido interesante, esta temporada, dejar de trabajar sólo con una persona, más o menos aislado, durante dos temporadas, y volver a entrar en un par de escenas de grup
¿Qué ha sido lo más divertido que has hecho esta temporada de Juego de Tronos?
¡Las espadas! Llevaba años esperando echarle mano a una espada, y este año he podido montar a caballo en una escena, y blandir una espada. Eso es lo que sueñas cuando eres pequeño. Esta temporada me han dado mi espada, y me he pasado casi todo el tiempo, todos los días, paseándome por allí diciéndoles a todos: “¡Mirad qué espada tengo!”. Seguro que al final estaban hartos de mí.
¿Has tenido tu propio caballo?
Sí, sí. Se llamaba Tornado. Y cuando quería era súper rápido, pero era muy cariñoso y se portaba de maravilla.
¿Y si querías que no fuera tan rápido? ¿Frenaba bien?
Era muy bueno. Y yo le hablaba todo el día para asegurarme de que nos entendiésemos. Creo que él diría lo mismo de mí. O a lo mejor sólo decía: “Ese tío cree que sabe montar y estoy siendo amable con él”. Pero no, yo adoro a los animales, y si me dan la oportunidad de trabajar con ellos… Ya sé que probablemente no me convenga decir esto, pero si me dan ocasión de trabajar con animales, me encanta. Creo que son criaturas fascinantes, al ver cómo se comportan, y cómo piensan y actúan.
Dada la historia de Pod, ¿te has cambiado alguna vez de traje, en estas cinco temporadas de Juego de Tronos?
No, nunca me lo he cambiado. Me han puesto distintos accesorios de vez en cuando, y he tenido dos capas diferentes, aunque ahora han desaparecido, pero nunca he llevado otro traje.
¿Y no huele un poco?
Pues verás, desde la primera temporada he crecido, y cada año tienen que sacarle un poco de los hombros y tal, pero no sé, ese traje tiene algo que me gusta, me resulta agradable haber llevado lo mismo siempre, desde que empecé en esto. Creo que mola. Siempre que me pongo el traje, estoy ahí. Es como si desarrollaras cierta relación con la ropa, cuando la has llevado cinco años, aunque parezca raro. No creo haber usado nunca una prenda durante cinco años, así que es agradable tener algo que me recuerde las primeras temporadas, y llevarlo siempre.
Como has dicho, ya llevas mucho tiempo en la serie Juego de Tronos. ¿Notas cómo evoluciona temporada a temporada?
Es un fenómeno cultural. Es una serie increíble, un caso raro. Nadie podría haber previsto que tuviera este éxito. El que haya triunfado en el mundo entero es fantástico, y sí, noto que cada vez triunfa más. Es de esas cosas que, cuando te subes a un taxi, si te preguntan a qué te dedicas y dices que eres actor, siempre dicen: “Ah, ¿y qué has hecho?” Cuando dices “Juego de Tronos”, todo el mundo ve la serie, o te dice “yo no la veo, pero mis hijos sí, o mi mujer sí, o mi marido…” Y cada vez es más famosa, y te reconocen más. Así que sí, me he dado cuenta, y cada año me parece imposible que mejore aun más, pero luego pasa. Va a ser una de esas series que es cada vez más famosa, hasta el final. No veo motivos para quitar el pie del acelerador, ahora mismo.
¿Hay fans de Pod? ¿Tienes tus propios seguidores?
Pues no sé si hay un club o algo así, la verdad. ¿Cómo se llamarían? ¿Los “Poditos”? Al público le cae bien, y es precioso hacer algo con lo que la gente disfrute. Es magnífico tener la oportunidad de encarnar a un chico bueno, un tipo majo, en un mundo repleto de personas con motivos ocultos e ideas maquiavélicas. Es como un personaje legendario. Creo que a mucha gente le gustaría invitar a Pod a una cerveza, así que si alguien me ve en un bar, que lo haga, por favor.
Como ahora mismo no hay más libros, la historia podría ir hacia cualquier lado. ¿Cómo te gustaría que acabase Pod?
Pues me gustaría que volviera con Tyrion, y que le nombraran caballero. Creo que está demostrando todas las características que debe tener un caballero: es honorable, noble, honrado, buen luchador, amable con las damas… y todo eso es muy importante en un caballero. También pienso que sería maravilloso que Tyrion volviese a tener problemas y Pod consiguiera salvarle, o que se encontrasen sin más, al final, y todos vivieran felices para siempre. Eso no se puede descartar, ¿verdad?