Los cambios respecto a la serie original son evidentes desde los primeros pasos que damos junto a nuestra nueva protagonista. Panini Comics, dentro de su línea Evolution, nos trae el primer arco de la nueva encarnación de Kick-Ass.
De Nueva York a Nuevo México, de hombre a mujer, de héroe a ladrona con escrúpulos. El punto de partida de esta nueva Kick-Ass proviene de una situación dramática que Patience Lee ha sufrido. Tras servir en una unidad de élite, de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos de América, su regreso a casa no es tal y como había imaginado. Su marido se ha ido con otra destrozando los planes y sueños que tenía de empezar de nuevo junto a su hija en común. Sin su sueldo como militar tendrá que sacrificarse para poder ir a la universidad mientras su trabajo como camarera no le da suficiente para mantener a su familia.
Mark Millar ha dotado a Patience Lee de un trasfondo espectacular, basado en un perfil muy realista. Le rodea de su pasado militar como miembro del 160th Regimiento de Aviación de Operaciones Especiales (SOAR en sus siglas en inglés). Conocidos como Night Stalkers (Acechadores Nocturnos) su lema es: “Los Acechadores Nocturnos no abandonan”. La creación del regimiento data de 1981 y se nutrió de personal que provenía de la 101 División Aerotransportada, unidad que se ganó su merecida fama durante el Desembarco de Normandía en la Segunda Guerra Mundial. El entrenamiento de sus miembros pasa por formación en combate con armas, cuerpo a cuerpo, evasión, supervivencia y otras habilidades enfocadas a convertirlos en soldados con elevados recursos a nivel individual y colectivo. Sus misiones principales pasan por infiltrarse tras las líneas enemigas y extraer o introducir a miembros de operaciones especiales. Todo esto convierte a Patience Lee en un elemento a tener muy en cuenta.
De la torpeza de Lizewski en su afán por convertirse en superhéroe no queda nada en Lee. Dar un golpe para asegurarse su futuro económico la convierte en una suerte de Robin Hood moderno que roba a los delincuentes adinerados para repartir a los necesitados, incluida ella misma, que no llega a fin de mes. Una historia que nos adentra en los bajos fondos y teje sus hilos en las organizaciones mafiosas que controlan el devenir de esas comunidades, cuyo único recurso en muchas ocasiones es formar parte de esas bandas criminales o huir si se lo pueden permitir.
Mientras Mark Millar da una enorme vuelta de tuerca a su concepto del Kick-Ass vigilante, John Romita Jr. nos ofrece uno de sus mejores trabajos de los últimos años. Puede ser que influya ser el propietario de los derechos y de ese modo mime mucho más este proyecto. O por el contrario que sea más cuestión de cuál sea el profesional que entinte sus lápices. En este caso esa labor recae en Peter Steigerwald, que también se encarga de dar color a la obra. Romita aumenta su nivel de detalle y enriquece la narrativa aportando recursos que no dejan escenas vacías ni fondos sin pormenorizar, dando una sensación muy cinematográfica en todo momento. Steigerwald interpreta el dibujo sin apenas injerencias, dotando de enorme fuerza al trazo exhaustivo de Romita. Los autores originales dejarán las futuras entregas en manos del estadounidense Steve Niles (30 días de oscuridad) y del argentino Marcelo Frusini (Hellblazer), que se han encargado de los siguientes arcos que continúan las aventuras de Patience Lee.
Kick-Ass: La Chica Nueva no es más de lo mismo, reinventa el concepto y lo dota de profundidad. Ahora ya no estamos en un mundo de adolescentes, hemos pasado a un terreno más adulto, al de una madre que debe velar por su familia, que cuenta con las habilidades para lograr fortaleza, que no se achanta ante la peor de las situaciones, que como buena ex-Acechadora Nocturna… no abandona.
Sinopsis Oficial
Kick-Ass está patrullando las calles, dispuesto a eliminar a los peores criminales de Nuevo México. Pero hay un nuevo rostro bajo esa vieja máscara, una nueva figura bajo el famoso traje de neopreno verde y amarillo. Una soldado que regresa de los horrores de la guerra para encontrar que lo único que le espera es una nueva batalla en las calles de su ciudad. Una heroína que trabaja como camarera de día y lucha contra el crimen de noche. Una nueva KICK-ASS, con una familia que alimentar y un barrio en su ciudad natal que tiene que limpiar. Conoced a la sargento PATIENCE LEE, nuestra nueva superheroína favorita. ¿Podrá esta madre soltera hallar el equilibrio entre la vida familiar con las exigencias que conlleva ser una vigilante que combate el crimen? ¿O acaso esta cruzada que ha emprendido contra pandilleros y asesinos tendrá unas consecuencias terribles para ella?
