The Night Eaters la nueva serie de Marjorie Liu y Sana Takeda une problemas familiares con demonios fantasmas y cazadores de monstruos. Y creías que tu familia era rara.
En la tradición china los demonios y fantasmas tienen una gran presencia, incluso a día de hoy las historias de ficción aprovechan toda esta mitología. The Night Eaters une todas estas historias con algo más mundano, las peleas generacionales. Liu y Takeda presentan a una familia que proviene de un linaje tradicional pero cuyos hijos viven en una sociedad moderna y sin atender a las viejas costumbres, pero en este caso no hacerlo es peligroso. Terror, humor y peleas hogareñas con un arte deslumbrante.
La historia
La vida de Ipo no ha sido fácil, vivió una guerra, el desprecio de los suyos por ser mujer, la presión de una sociedad que no la tenía en cuenta. Pudo salir de aquello, y encontró el amor, cosa aún más difícil dado su carácter arisco y agresivo. Ahora es madre de dos jóvenes con vidas modernas en otro país, en el que las tradiciones solo son rituales y creencias obsoletas, Pero Ipo es algo más que una mujer mayor y cabreada, y sus hijos van a tener que aprender que su legado no son solo viejos ritos, o podrían morir.
Marjorie Liu y Sana Takeda han maravillado al mundo con su Monstress, una historia de fantasía oscura llena de elementos místicos orientales pasados por un filtro muy occidental. Continuando con su relación han creado esta historia, más pequeña, sin implicar destinos grandiosos o dioses apocalípticos, solamente una familia que une lo antiguo y lo nuevo, que pelea por llevarse bien, como cualquier familia.
Liu trabaja la historia a través de los flashbacks de Ipo, dejando claro su carácter hosco y su gran sentido de la responsabilidad. Pero también es una mujer que ama, y sentía miedo del futuro y ahora que ha llegado el miedo ha cambiado, sus hijos necesitan aprender algunas cosas que les han ocultado. Su marido Keto parece no tomarse muy en serio todo esto y sus hijos Billy y Milly son demasiado americanos para entender que el horror existe en las sombras.
Escenas que ponen los pelos de punta
Es una historia de horror, con escenas que ponen los pelos de punta. La escritora asiaticoamericana aprovecha la tragicomedia del presente para introducir pequeños elementos que esconden el mal que acecha. Y lo remata relatando poco a poco porque su protagonista es cómo es y porqué exige tantos todos. Es este personaje tan inescrutable, antipático y resabiado el que volverá loco al lector por su actitud, pero tiene razones para hacerlo y si bien al final no se le puede quitar la razón de su comportamiento se le puede culpar de falta de delicadeza. Aunque no de amor por los suyos. Es una madre, y todo el mundo ha discutido mil veces con la suya, no por las mismas razones, pero se verá reflejado en muchas de las páginas.
El arte de Sana Takeda sigue siendo espectacular. La dibujante ya ha sido premiada repetidas veces por su trabajo, pero me disgusta que siempre se le tenga que poner la etiqueta de artista digital, como si fuera más fácil trabajar con herramientas más modernas que con la tinta y el papel tradicional. Conocida por sus composiciones barrocas y recargadas, en Night Eaters se centra en la atmósfera y en los personajes, dejando que dominen el arte. Los colores apagados en las secuencias de terror contrastan con los de una familia llena de vida. Las sombras ocultan el mal y la familia vive en la luz, y ese contraste y sus desapariciones repentinas para que aparezcan los monstruos es de una elegancia increíble.
Conclusión
The Night Eaters es una trilogía que comienza con un gran nivel. Marjorie Liu y Sana Takeda dejan un listón muy alto para las siguientes partes pero si algo hemos aprendido con Monstress es que lo suyo es saltarse las barreras y romper los techos.
