La actriz Pamela Anderson, de 50 años, estuvo ayer en «Chester» y sacó a relucir todos los trapos sucios y sexuales que vivió en Hollywood.
Ayer por la noche, Pamela Anderson se convirtió en una de las grandes protagonistas de las redes sociales. Al menos en nuestro país. La actriz fue invitada al programa «Chester» presentado por el publicista Risto Mejide. Y habló sin tapujos, aunque con cierto miedo, sobre algunos temas extremadamente polémicas. Como por ejemplo el de los casos de abusos sexuales que han salpicado a Hollywood desde el desenmascaramiento del productor Harvey Weinstein. «El mundo de Hollywood está plagado de gente como Harvey Weinstein. Son muchísimos. Todos los sectores tienen gente como él, como cualquier mujer sabe«, aseguró Pamela Anderson, añadiendo que «todo el tiempo te están diciendo que subas a una habitación con alguien; por eso hay que ser muy lista y saber esquivar esas balas«.
«Esto me ha ocurrido en muchas ocasiones. La gente te dice: ‘Estoy pensando en ti para este papel en tal película. ¿Por qué no vienes a mi hotel y tenemos una entrevista en privado?’ Simplemente, no vas. Eso es lo que tienes que hacer. A mí me han ofrecido muchísimo dinero para… Compartir jacuzzi con alguien, y ese tipo de cosas«, reveló Pamela Anderson sobre las situaciones que ha vivido en la industria del cine. «Al principio era muy ingenua. Pero al final conseguí evitar esas trampas y, si creía que algo iba a salir mal, no lo hacía. Y ya está», señaló la actriz, agregando que «la gente está muy desesperada por conseguir un trabajo en Hollywood o por hacerse famosa; por eso piensan que esa es la única manera de hacerlo«.
La relación entre Harvey Weinstein y Pamela Anderson.
Pamela Anderson se cruzó en varias ocasiones con Harvey Weinstein. ¿Qué ha dicho sobre él? «No es una persona simpática, que digamos… Con él pacté una película de superhéroes o algo por el estilo. Iba a hacer de una chica invisible que tenía un perro invisible. Pero yo dije que no iba a trabajar con animales, porque también hay abusos y explotación sobre ellos por parte de la industria del cine. Me negué en rotundo. Le dije: ‘Si es un perro invisible, ponemos una X en el suelo y fin del asunto. Pero si hay un animal en el set, yo no trabajo’. Él me contestó que de ninguna de las maneras«, explicó. ¿Y qué pasó entonces? «No acepté el papel y él me amenazó. Me dijo que nunca encontraría trabajo en Hollywood y que era una afortunada porque él me había dirigido la palabra. ‘Nunca harás nada aquí’, me dijo. Fue muy cruel y muy grosero«, sentenció.
