Lo que le ha ocurrido a Donald Trump ha sido impactante, pero el cine ya nos ha mostrado cosas similares, como esta película de los 70.
La película de los 70, El Último Testigo (The Parallax View), dirigida por Alan J. Pakula, es un thriller político que explora el oscuro mundo de las conspiraciones y el control de los poderes políticos. La trama sigue a Joe Frady, un periodista que investiga la misteriosa muerte de varios testigos presenciales de un asesinato político de alto perfil. Frady descubre una organización secreta, la Parallax Corporation, que recluta a personas vulnerables para convertirlas en asesinos de figuras públicas y así manipular los eventos en todo el mundo. A medida que se adentra en la conspiración, Frady se encuentra atrapado en una red de engaños y peligros que pone en riesgo su propia vida.
El Último Testigo es un testimonio inquietante de cómo el cine puede anticipar y reflejar la realidad. La película de los 70 se centró en la idea de que los asesinatos de figuras políticas no siempre son obra de lobos solitarios, sino que pueden ser el resultado de complejas conspiraciones.
En el reparto destacan Warren Beatty, Paula Prentiss, William Daniels, Walter McGinn, Hume Cronyn, Kelly Thordsen, Chuck Waters y Earl Hindman.
Esta premisa resuena poderosamente con varios eventos recientes en la vida real.
La Muerte de Ebrahim Raisi.
Ebrahim Raisi, presidente de Irán, falleció en un accidente de helicóptero, un incidente que ha sido oficialmente clasificado como un accidente fortuito. Sin embargo, la naturaleza sospechosa del evento y la falta de transparencia en la investigación han levantado sospechas sobre una posible conspiración. Al igual que en El Último Testigo, donde los accidentes fatales de testigos clave eran encubiertos como eventos fortuitos, la muerte de Raisi ha generado teorías sobre la intervención de fuerzas ocultas.
El Ataque a Donald Trump.
Donald Trump, ex presidente de Estados Unidos, sufrió un disparo en la oreja en un ataque atribuido a un lobo solitario. La versión oficial sostiene que el agresor actuó solo, pero los paralelismos con la trama de El Último Testigo son innegables. En la película de los 70, los asesinos aparentemente solitarios eran en realidad manipulados por una organización mayor, lo que sugiere que el ataque a Trump podría no ser tan simple como parece.
El intento de asesinato del primer ministro eslovaco Robert Fico.
Robert Fico, primer ministro de Eslovaquia, sobrevivió a un intento de asesinato también atribuido a un lobo solitario. Este caso recuerda poderosamente a la narrativa de El Último Testigo, donde los asesinatos de figuras políticas eran parte de una trama más amplia y oculta. La repetición de incidentes similares a lo largo del tiempo sugiere que los patrones de la vida real podrían estar reflejando la ficción de Pakula.
Reflexión.
El Último Testigo no solo es una obra maestra del cine de suspenso, sino también una reflexión profunda sobre la naturaleza de las conspiraciones políticas. Los eventos recientes en la arena política mundial parecen salir de su guion, demostrando que la realidad a menudo imita al arte. Mientras las investigaciones oficiales se mantienen firmes en sus conclusiones de ataques aislados y accidentes, la influencia de poderosas organizaciones y conspiraciones sigue siendo una posibilidad inquietante que no debe ser ignorada.
En este enlace encontrarás una gran recomendación de otra gran película de los 70.
