La serie ‘Puño de hierro, Arma viviente’ que comienza en este tomo está marcada por el poder del dibujo. Acción cruda y potencia en la acción, más sangre y dolor en cada golpe
El defensor de K’un-Lun decidió volver al mundo humano y renegar de la inmortalidad. Rechazó ser el Yu ti, líder de la ciudad inmortal, y vivir en la tierra que tanto tiempo añoró. Pero el pasado siempre vuelve y la destrucción se cierne sobre la ciudad del dragón. Puño de Hierro tiene por delante la más difícil de las batallas, por su ciudad, por sus amigos, por su alma. Kaare Andrews nos presenta la lucha donde “el arma viviente” debe demostrar su condición de maestro de las artes marciales, ¡o morir en el intento!
Daniel Rand se enfrenta a su pasado, al mas doloroso. El retorno de una figura hace tiempo olvidada, los recuerdos de su obsesionado padre, la culpabilidad de su madre para con la muerte del mismo, y su visión de una infancia no tan idílica como suele contar. El pasado atormenta al héroe del puño dorado, pero el presente le golpea como un bloque de acero. K’un-Lun atacada, arrasada, y el eterno dragón Shou-Lao, el Inmortal, vencido y decapitado. La víbora en el seno de la ciudad sin edad ha mordido la mano que le calienta y la destrucción llega todos lados. Sólo el defensor elegido puede salvar del caos y el olvido a sus habitantes, pero Puño de Hierro no es suficiente.
Kaare Kyle Andrews nos trae una historia de derrota y renacimiento, de poder y sobre todo, de Kung Fu. El americano recoge el testigo de las historias de Ed Brubaker y Matt Fraction y el arte de David Aja para acercarnos a una nueva visión del luchador mas mortal cuerpo a cuerpo del universo Marvel. Un difícil papel tras la magnifica etapa de los tres autores. Andrews no olvida lo contado, pero decide acercarse al lado mas oscuro del personaje, su dramático pasado. Se centra en su infancia marcada por la perdida, su entrenamiento y crecimiento en una cultura ajena y alienigena para él. Nos trae a un Daniel Rand más intimo, traumatizado en buena parte por no aceptar su pasado como hijo. Una vez aceptado su destino como el Puño de Hierro de K’un-Lun, el autor decide enfrentarlo a su vida como hombre.
Y acierta en el enfoque. El cambio de tercio en las historias trae una nueva perspectiva del personaje y una etapa más oscura y adulta. Se aleja del pulp y las artes marciales místicas de sus predecesores y decide crear un camino oscuro de redención. Si Brubaker y Fraction nos mostraron los movimientos fluidos y elegantes del Kung Fu, Kaare Andrews nos enseña los huesos rotos y la sangre que mana del puño al golpear y de las heridas al abrirse.
La serie que comienza en este tomo está marcada por el poder del dibujo. Acción cruda y potencia en la acción, mas sangre y dolor en cada golpe, elegantes movimientos que terminan en crujidos secos y blandos goteos. Mas oscuro que nunca, el sobrenombre de “Arma Viviente” está más acentuado que nunca, un arma destruye, esta hecha para dañar y matar, Daniel Rand desarrollo su filo para ello. Así el arte es mas oscuro y la sombras cubren los movimientos, las siluetas marcan los combates, y vemos las artes marciales como algo mas que un bello ejercicio, son peligrosas. Los diálogos de Andrews tienen la debilidad de ser articulados en cuadros muy estáticos, busca que la historia sea un tapiz donde la acción sea diferente para cada momento. Hablar no es luchar, luchar no es destruir, cada secuencia de viñetas tiene su estilo. Afecta a la narración, añade un estilo pictórico mas que dinámico y pierde algo de vida en esas secuencias, pero no entorpece la lectura. También sirve de muestra de las grandes capacidades del dibujante, que por momentos recuerda al Frank Miller de la ‘Elektra resurrección’, del ‘Regreso del Caballero Oscuro’, y de ‘Ronin’, menos fluido (Miller ya tenia muchas tablas con los lapices cuando pinto estos grandes cómics), pero no por ello menos atractivo.
Puño de Hierro es una serie que retrotraía a las películas de artes marciales de Hong Kong, a Bruce Lee, a ‘Kill Bill’ de Tarantino (con menos sangre). ‘Arma Viviente’ es otro cantar, una nueva resurrección de un personaje secundario. Tal vez con el nuevo ‘Caballero Luna’ de Warren Ellis (veremos que hacen el resto de guionistas que se encargarán de los siguientes arcos) uno de los mejores cómics de luchadores que publica Marvel en la actualidad. Duro, rápido, doloroso, mas real a al vista y al gusto que nunca. Si te gusta el lado oscuro de los superhéroes, aquí tienes una gran muestra de ello.