En ‘Quantum and Woody’ dos hermanos reciben superpoderes accidentalmente, y los usan para descubrir quien mató a su padre.
Quantum and Woody es una de las grandes sorpresas en cómics. Un gran poder conlleva una gran responsabilidad, casi siempre. Superpoderes, malvados enemigos, clones, explosiones, un buen número de desnudos, golpes, y una cantidad alucinante de palabrotas es lo que les ha traído a los hermanos Henderson. ¿Para el lector? Una de las mejores series cómicas del mercado, una parodia de los superheroes y de todo lo que pasa por delante, que no dejará indiferente a nadie.
Que podría pasar si alguien recibiera poderes y no fuera el adecuado. Ha habido muchas historias con esta premisa, pero no como ésta. Quantum y Woody son dos hermanos de diferente raza, hijos de un científico que es asesinado y que trabaja para una empresa más o menos oscura, ante tanto misterio, ambos deciden resolver el crimen. Durante la investigación, o lo que los hermanos Marx llamarían así, reciben poderes cuánticos, campos de protección y emisiones de energía destructiva. Quantum es Eric Henderson, Woody es Woody Henderson, uno es un ordenado ex militar que trabaja en seguridad, serio y estirado, el otro es un timador desastroso que estropea todo lo que toca. Los lectores pueden adivinar que poder le toca a cada uno dependiendo de su personalidad. Y no sólo eso, hay un experimento mortal que se escapa y se une a su fiesta, una cabra, y es peligrosa.
(LADILLO)” ¡¡¡LA CABRA ANDA SUELTA!! ¡¡¡ME CAGO EN SU P&!@ MADRE , TAMBIÉN SE HA ESCAPADO!!!” Científico loco con pecera de gel color orín en la cabeza.
DC se ha vuelto serio hasta el hieratismo, Marvel tan heroico y colorido que deslumbra, Image es alternativo en todo lo que intenta, Valiant hace todo lo que nadie se atreve. Y esta colección es la demostración de ello, Quantum y Woody es una comedia de “buddies” a la vieja usanza, como eran ’48 horas’, ‘Arma Letal’ o ‘El ultimo Boy Scout’, el ritmo lo marcan las peleas explosiones y los chistes fáciles: Los protagonistas son socarrones, mordaces, sarcásticos, cuando Eric intenta ser serio, Woody destroza su imagen de superheroe. No es que no sepan cómo ser héroes, ¡¡es qué no son héroes!! Son dos tíos que al unir fuerzas en lugar de sumar virtudes, acumulan defectos. No es una broma que la serie afirme que son el peor supergrupo del mundo, ¡es qué son el peor supergrupo del mundo!
Los culpables del berenjenal
James Asmus ha conseguido acumular todas las fantasías de un adolescente en Woody, y convertirlo en un inmenso desastre andante, pero con una personalidad arrolladora y un gran amor por su hermano, al que nunca lo dejara sólo, para su desgracia. Eric es estable, ordenado, pero eso sólo esconde una represión que solo su hermano es capaz de superar, dicho pronto y mal tiene una vara metida pro el trasero, y cuando Woody aparece acaba saliendo de ahí por la presión de la mala leche. Son dos personalidades que podrían ser complementarias, que podrían funcionar, pero en lugar de ello sólo consiguen descubrir nuevos puntos de disensión. Es esa mecánica casi autodestructiva de su relación la que hace que sean carne de comedia. Además, ¡ llevan una cabra!, ¿qué más se puede pedir?
(LADILLO) “¡¡Woody !! ¿Por qué narices no has venido disfrazado? ¡¡Pero si esto ha sido idea tuya!! […] Si, lo siento pero es que he visto mi reflejo en la puerta del ascensor y tenías razón. Estos disfraces son muy gais.” Eric y Woody Henderson, discusión sobre moda.
El escritor americano construye esta parodia jugando con los tópicos de los superheroes, y los lleva al extremo. De hecho no es sólo una parodia de los superheroes en general, es una parodia de los actuales héroes serios y duros o brillantes y coloridos, no deja títere con cabeza. Y ya que puede ataca a los científicos y su falta de ética, el oscurantismo de los poderosos, y es capaz de convertir al muy querido por los norteamericanos Thomas Alba Edison, en el malvado enemigo del avance y de la ciencia, Asmus demuestra que no hay nada sagrado, que todo puede ser criticado, parodiado y humillado, y lo hace muy bien. Los Monty Phyton no habrían podido crear situaciones tan extrañas como los payasos araña con agujas hipodérmicas, o afirmar que el 83% de los científicos piensa en como construir monstruos.
El arte a cargo de Tom Fowler se ajusta a todo lo que podía pedir un cómic de estas características. Rápido de leer, de trazo desmadejado por momentos, con detalle en los rostros y con muchos momentos de imágenes casi aberrantes, para traer a la superficie ese componente cómic y a veces surrealista e las situaciones que encuentran los héroes. Personalmente me recuerda mucho a Brett Blevins, es un estilo desgarbado conde prima el movimiento y la acción, donde la pagina se lee en una exhalación. Y su imaginación para lo estrambotico añade mas potencia aún al cóctel que Asmus prepara. Sólo hay que poner un ejemplo, es la primera vez que veo a un héroe descoser el cuerpo de un villano, que yo recuerde, ¡y lo hace sin querer!
‘Quantum y Woody’ ya ha recibido premios como mejor cómic de humor, por mi parte no creo que sea sólo una colección de humor, encierra muchas buenas ideas contadas ligeramente, tiene mas fondo de lo que parece. Valiant tiene con esta serie y con ‘Archer y Armstrong’ dos grandes cómics de humor, pero mientras que la serie de Fred Van Lente es una historia de aventuras con grandes dosis de humor, la de Asmus es una historia de humor con superheroes. Y creo que es una de las joyas de la corona de Valiant, Aleta ha traído una serie que repetidas veces hemos pedido que se publicara, y ha dado en el clavo. La serie mas divertida del panorama actual, no dejaras de reír ni cuando acabes el tomo.
