Lobezno: Blanco, Negro y Sangre, tomo en tapa blanda en la línea de los publicados en La Gran Novela de La Patrulla-X y la de Los Cuatro Fantásticos de Ed Piskor y Tom Scioli respectivamente. Panini Comics recoge los cuatro números USA de esta colección en un solo volumen de gran tamaño que se convierte en una opción más que interesante para acercarse al mutante de las garras de adamantium.
Viajando por la historia de Logan
Desde que comenzamos la lectura de este comic vamos pasando por una variopinta cantidad de referencias al pasado del personaje. Pocos momentos de relativa importancia quedan sueltos, muchos si sois muy fans de Logan, pero para hacernos una idea general de quién es Lobezno, y por qué es el mejor en lo que hace, contamos con una variedad de eventos que revisitan su pasado. Doce narraciones diferentes (tres por cada episodio USA) llevadas a cabo por distintos equipos creativos de una calidad superior. Ya veremos los nombres que los componen más adelante, con alguna sorpresa entre ellos. Y, claro está, el elemento diferenciador es la ausencia de color, salvo el empleo del rojo, no solo para la sangre (como indica el título), también para destacar algún otro componente visual.
El viaje nos va a llevar desde los tiempos del Proyecto Arma-X a visitar lugares como Madripur, con Logan como su alter ego Parche, visitas a Japón, Mundo Asesino de Arcade, el helado norte canadiense, la Tierra Salvaje, enfrentamientos con Hydra, I.M.A., Dientes de Sable o Mística… incluso referencias a su paso por X-Force, los Cosechadores o un fuerte encontronazo con Caín Marko, el Juggernaut. Todo ello termina por formar un más que interesante conjunto en el que harán acto de presencia secundarios de la talla de Mariko Yashida, Nick Furia, Frank Castle o Illyana Rasputin. En resumidas cuentas, una forma breve pero concisa de acercarse a momentos muy importantes de la vida del personaje mediante historias nunca contadas apoyadas sobre otras que son traídas a la memoria del lector.
Rojo sobre blanco y negro
No es la primera vez, ni será la última, que aparece un comic con un enfoque artístico similar a este. Tenemos ejemplos de todo tipo pero en lo que a Marvel se refiere es difícil no recordar los comics de Jeph Loeb y Tim Sale sobre Daredevil, Spiderman o Hulk. Eso sí, de este volumen de tapa blanda y tamaño de 23,4 cm por 33 cm, no se encargan un solo guionista y un dibujante, tenemos doce equipos creativos diferentes con una selección de autores de primerísima línea, entre los que se cuentan tres estrellas nacionales por los que ya merece la pena acercarse a estas páginas de gran calidad. Salvador Larroca, Jorge Fornés y Jesús Saiz dejan perlas espectaculares de su trabajo dando lo mejor de si mismos ante una obra que ha buscado la excelencia.
A Larroca le acompaña el mismísimo Chris Claremont, el Patriarca Mutante. Ambos ya han colaborado anteriormente en las páginas de Los Cuatro Fantásticos o Xtreme X-Men y aquí nos narran la parte que afecta al pasado de Lobezno en Madripur, lugar creado por Claremont en el New Mutants #32 USA y reorientado para la andadura de Logan en solitario en los números de Marvel Comics Presents que sirvieron de prólogo a su colección regular. Jed MacKay, autor de la actual colección de la Gata Negra y futuro guionista de la nueva serie del Caballero Luna, lleva a Jesús Saiz a plasmar un entorno modificado de Marte donde Logan se enfrenta a I.M.A. haciéndonos ver que no es solo un salvaje luchador sino un guerrero con más recursos que sus sentidos aumentados y su esqueleto de adamantium.
Pero la sorpresa salta con el guionista que dicta las páginas de Jorge Fornés, John Ridley. Se trata, ni más ni menos, del oscarizado guionista de 12 años de esclavitud, película dirigida por Steve McQueen, que ganó también el Oscar a mejor película. No es su primera incursión en el mundo del comic pues ya ha colaborado anteriormente con DC Comics, pero aquí nos lleva a una historia relacionada con Japón y cierta hija adoptiva que acerca a Lobezno a uno de los entornos que mayor carga emocional le produce, sobre todo por su amor hacia Mariko. El otro guionista ligado al entorno audiovisual es Steven S. DeKnight, famoso por la versión moderna, en formato serie, de Spartacus, así como guionista principal de la primera temporada de Daredevil para Netflix. Junto a Paulo Siqueira nos deja un divertido periplo por la Tierra Salvaje, junto a Sauron y Garokk.
Un concepto con muchas posibilidades
El elenco completo de artistas se completa con nombres como los de Gerry Duggan, Matthew Rosenberg, Vita Ayala, Saladin Ahmed, Donny Cates, Kelly Thompson y Ed Brisson, a los manso del procesador de textos, y con Adam Kubert, Joshua Cassara, Greg Land, Kev Walker, Chris Bachalo, Khary Randolph y Leonard Kirk, que junto a Declan Shalvey, que ejerce como autor completo en la aventura que lleva a Logan a Canada, forman una alineación de ilustradores de lujo. Impresionante la calidad agrupada en estas 136 páginas.
Este tipo de trabajos basa su éxito en sus autores pero también en una organización que permita dar coherencia a lo que se está narrando. Marvel puede llevar a cabo productos similares con la práctica totalidad de sus personajes, de hecho ya va a publicar un Deadpool Black, White and Blood, con fecha del cuatro de agosto en Estados Unidos para su primer número, bajo un formato idéntico. Así hasta que se agote la gallina de los huevos de oro. De momento con Lobezno ha salido todo a pedir de boca.