No han sido pocos los portadores del uniforme del Capitán América pero el que nos viene a la mente de todos es ese pequeño chico enfermizo que no daba la talla para poder alistarse. Panini Comics comienza la publicación de la nueva miniserie que nos va a presentar a un buen puñado de nuevos Capitanes América.
El hombre tras el escudo
Steve Rogers no sabía lo que le iba a suponer convertirse en el único supersoldado de los Estados Unidos que luchó de cara al público en la Segunda Guerra Mundial. Él solo quería poder aportar a su país su granito de arena, combatir cara a cara contra la Alemania Nazi dentro de uno de los ejércitos que recuperaron Europa de las garras de Adolf Hitler. Lo que no se le pasaba por la imaginación es que se iba a convertir en la figura más celebrada y en un ejemplo para toda una nación. Iba a encarnar los anhelos y deseos de muchos norteamericanos, sería la representación ideal de su sueño, ese que incluye una casa rodeada por una valla pintada de color blanco.
Todo en la representación del Capi resulta significativo y alcanza la categoría de icónico. Desde el uniforme de las barras y estrellas a la gran A que destaca sobre su frente impresa en la máscara, por no hablar de su mayor símbolo, un escudo que no siempre tuvo forma circular pero que ha terminado por convertirse en su imagen más característica y representativa. Por eso es importante que una figura en la sombra, oculto por una velocidad inusual, se apodere del escudo que tanto significa y provoque la unión de varios Capitanes en su afán por recuperarlo.
La estructura de la serie
Cada entrega de Los Estados Unidos del Capitán América está compuesta de dos partes diferenciadas. En la, llamémosle, principal tendremos la trama que nos pondrá tras la recuperación del escudo, a cargo de Christopher Cantwell (que lleva unos meses pisando fuerte con su Doctor Muerte e Iron Man) y Dale Eaglesham (muy recordado por su paso por Los Cuatro Fantásticos que escribió Jonathan Hickman), mientras en la secundaria iremos conociendo diferentes encarnaciones hasta ahora desconocidas del Capitán América. No estamos ante héroes de primera línea, de los que copan portadas y noticias en páginas interiores de prestigiosos periódicos y revistas. Más bien estamos ante gente de a pié que realiza una labor más social, que defiende a los más necesitados sin hacer tanto ruido.
El protagonista de esta primera entrega es un joven muchacho llamado Aaron Fisher, más conocido como el Capitán América de las vías. Fisher ha tomado a su cargo la responsabilidad de proteger a aquellos que hacen usa del sistema ferroviario de Estados Unidos para huir, sea cual sea el motivo, centrándose de forma especial en aquellos que comparten su misma condición sexual y escapan de hogares donde no son aceptados por sus propias familias. Porque Aaron es gay y no se oculta por ello, todo lo contrario, se enorgullece y le da normalidad, como debe ser en cualquier sociedad desarrollada convenientemente.
Una comunidad queer
“Queer” es una palabra que describe una identidad de género y sexual diferente a la heterosexual y cisgénero. … Queer a veces se usa para expresar que la sexualidad y el género pueden ser complicadas. Cambiar con el tiempo y no encajar del todo en una identidad u otra, por ejemplo: ser hombre o mujer, o ser gay o hetero. Este Capitán América de las vías da visibilidad a ese grupo integrado dentro de la Comunidad LGTBQ+ y lo hace con guion de Josh Trujillo y dibujo de Jan (antes Óscar) Bazaldúa, miembros de la misma.
Por lo tanto nos encontramos ante una interesante propuesta por partida doble. Una aventura con un robo misterioso como catalizador al más puro estilo Marvel acompañada de historias que nos van a descubrir a nuevos personajes que a su manera también son símbolos dentro de un ámbito más reducido de influencia. La que se circunscribe a una ciudad, a un sistema de transporte, a una vida menos grandilocuente pero que merece ser vivida con toda la ayuda con la que se pueda contar. El camino es duro, mejor con una mano amiga a nuestro lado.
