La espectacular batalla de Sonic 3 puede recordar a lo mejor de Dragon Ball, por lo que Hollywood debería dar el paso y atreverse con una buena adaptación del querido manga de Akira Toriyama.
Atención SPOILERS. La película Sonic 3 es un punto de inflexión para las adaptaciones cinematográficas de videojuegos, no solo por ser una gran adaptación de personajes increíbles, sino también por demostrar conceptos épicos y de alta carga visual. En particular, el tercer acto de esta película, que enfrentará a Sonic y Shadow en sus versiones doradas, deja claro que la acción y las emociones de los enfrentamientos icónicos de Dragon Ball son viables en pantalla grande.
El enfrentamiento entre Sonic y Shadow en su forma super esmeralda, con ambos transformados en sus versiones doradas, evoca directamente las peleas de Goku y Vegeta en Dragon Ball Z. Sonic, con su actitud despreocupada y heroica, recuerda a Goku, mientras que Shadow, más serio, reservado y con un pasado cargado de tragedia, es un claro paralelo a Vegeta. Esta dinámica, que se desarrolla a lo largo de Sonic 3, culmina en una batalla impresionante donde ambos deben dejar sus diferencias de lado para enfrentar una amenaza mayor: un villano que pone en peligro a la Tierra: Gerald Robotnik (abuelo del Dr. Ivo Robotnik).
Los avances tecnológicos en efectos especiales que vimos en Sonic 2 y que ahora se potencian aún más en esta tercera entrega aseguran que las escenas de acción sean un espectáculo visual. El uso de efectos digitales para capturar las transformaciones y la velocidad de los personajes tiene un nivel de calidad que los fans de Dragon Ball siempre han deseado para una película de acción real de su manga favorito.
Sonic Adventure 2 y las influencias de Dragon Ball.
La conexión entre Sonic y Dragon Ball no es nueva, y el videojuego Sonic Adventure 2 (2001) es un ejemplo perfecto de cómo estas influencias han sido parte integral de la saga desde hace años. En este juego, introducido para la consola Sega Dreamcast, conocimos por primera vez a Shadow the Hedgehog, un personaje que rápidamente se convirtió en un contrapunto a Sonic.
En Sonic Adventure 2, la narrativa gira en torno a la lucha entre Sonic y Shadow mientras intentan detener la destrucción de la Tierra por parte del coloso espacial ARK y su creador, el Dr. Gerald Robotnik. Este juego también presenta el concepto de las Chaos Emeralds, que permiten a los personajes alcanzar su forma «Super», evocando claramente las transformaciones Super Saiyan de Dragon Ball. Además, las batallas a alta velocidad, los poderes de energía y el sacrificio heroico final de Shadow son elementos que podrían encajar perfectamente en una historia de Dragon Ball Z. Algo que ha adaptado a la perfección la película Sonic 3.
La relación entre Sonic y Shadow, que evoluciona de una rivalidad a un entendimiento mutuo, recuerda la transición de Goku y Vegeta de enemigos a compañeros de lucha. Esto refuerza aún más las similitudes entre las dos franquicias, no solo en sus personajes, sino también en sus temas de redención, amistad y sacrificio.
¿Cómo sería una película de Dragon Ball con los efectos especiales actuales?
El gran logro de Sonic 3 es que logra un equilibrio entre lo fantástico y lo realista, sin perder la esencia caricaturesca de los personajes. Esto abre una puerta para imaginar cómo sería una película de Dragon Ball con una ejecución similar.
Con los efectos especiales de Sonic 3, podríamos tener combates aéreos con ráfagas de energía, transformaciones Super Saiyan con un brillo dorado que refleje la intensidad emocional de los personajes, y escenarios que se destruyen al ritmo de los enfrentamientos, tal como lo vimos en las peleas de Sonic y Shadow. Además, las personalidades de los personajes, desde el carisma de Sonic hasta la melancolía de Shadow, son una prueba de que es posible adaptar héroes icónicos con sus rasgos distintivos, algo que sería esencial para personajes como Goku, Vegeta o Freezer.
El uso de CGI para capturar la velocidad y el poder de los personajes en Sonic 3 también sería clave para trasladar las peleas de Dragon Ball al cine. Las coreografías podrían estar a la altura de lo que vimos en animes como Dragon Ball Super: Broly, donde los combates son dinámicos, llenos de energía y extremadamente visuales.
Además, la construcción de relaciones entre los personajes sería esencial. Así como Sonic y Shadow tienen una evolución emocional a lo largo de la película, una adaptación de Dragon Ball debería explorar la camaradería y las tensiones entre Goku y Vegeta, capturando la profundidad de sus interacciones.
Hay un precedente negativo.
Dragonball Evolution (2009) fue un intento fallido de llevar la franquicia al cine en acción real, pero Sonic 3 demuestra que con un equipo comprometido, un respeto profundo por el material original y los avances en tecnología cinematográfica, es posible hacer justicia a una saga tan querida como Dragon Ball.
La película de Sonic no solo es un hito para los fans del erizo azul, sino también un recordatorio de que los sueños de los fans de Dragon Ball de ver a Goku y compañía en una película de acción real digna pueden hacerse realidad. ¿Estás de acuerdo? Déjame tus comentarios a continuación en la sección de opinión.
