Los peores enemigos de los Jedi son tan míticos como los mismos caballeros, y ahora llega la oportunidad de demostrar porqué en Star Wars. Era de la República.
Detrás de un buen héroe siempre hay un gran villano, y todos han tenido un pasado, Planeta Cómic nos acerca al de los más icónicos de Star Wars en este tomo unitario que recoge la miniserie Star Wars. Era de la República. Villanos escrita por Jody Houser y dibujada por varios artistas como Luke Ross o Carlos Gómez. En este libro, no veras buenas intenciones ni gestos heroicos, esta vez toca visitar al lado oscuro.
Darth Maul, Jango Fett, el Conde Dooku, el General Grievous, Asajj Ventress, todos villanos distinguidos con mayor o menor importancia dentro de Star Wars, han ganado el estatus de mitos dentro de la galaxia creada por Lucas. En esta época nueva que Disney ha entregado a Marvel en el terreno de las viñetas, los antagonistas tienen una importancia que antes sólo recibieron tangencialmente, ya es hora de que los malos, cuenten su historia.
Jody Houser se encarga de los textos de Star Wars: La Era de la República. Villanos y Luke Ross de adaptarlos a las viñetas , con la aportación de Carlos Gómez en el especial de Asajj. Houser es ahora mismo uno de los pilares de la saga galáctica en su periplo por Marvel, encargándose de todo lo que ha sido hasta ahora la Era de la República, Héroes y Villanos, y demostrando que sabe cómo construir buenas historias y profundizar en los personajes siendo fiel al legado de las películas y series.
Darth Maul
Renovado por el final de la serie de The Clone Wars, el ex sith ha tenido siempre intervenciones brillantes en los cómics, que han rellenado buena parte de su historia antes de episodio 1 y tras su intervención en la serie que creó Dave Filoni.
En este relato, vemos su preparación para ser el elegido de Darth Sidious, tras lo acontecido en su anterior miniserie. Una historia para examinar el destino y la fuerza de voluntad de Maul para llegar a saber lo que se le enseñó, el arma que destruirá a todos los Jedi. Pero no sólo el consejo tiene usuarios de la fuerza, y no son sólo peleas las pruebas que forjan a un Sith.
Jango Fett
EL mejor cazarrecompensas de la galaxia exigió un clon limpio como pago por sus servicios, un heredero de su legado. Sin programación y sin ningún tipo de alteración genética. Ahí acabó el trabajo de los doctores de Camino, y empezó el suyo, el de maestro, el de padre.
La reputación lo es todo para los cazarrecompensas, no pueden ser débiles, no pueden dejar pasar ofensas o deudas, y eso Bobba va a aprenderlo de primera mano. Así como a luchar y prepararse para todas las posibilidades que surgen en un negocio tan letal como es el de cazar a otros.
Conde Dooku
Si Darth Maul es un arma enfocada contra lo Jedi, Dooku es el rencor hacia los errores del consejo, de las mentiras, concentrado, destilado, para cambiar el universo, en algo mejor, sin falsedades ni hipocresías de hombres poderosos. Pero antes de su abierta rebelión, tuvo que manejarse entre bambalinas, siendo solo Conde, tras dejar de ser maestro Jedi.
Es tal vez el más interesante de los relatos, pudiendo ver la idiosincrasia de un personaje complejo, que sin ser completamente malvado se emplaza en el lado oscuro. No en lo terrible, sino en lo pasional, en la búsqueda de libertad total. Esos aspectos del lado oscuro que son los que seducen, y acaban transformando a los que toman ese camino en monstruos oscuros.
General Grievous
Un personaje que conocemos mejor por sus apariciones en la serie de The Clone Wars que por las que ha tenido en la gran pantalla. En su historia, podemos apreciar algunos de sus puntos más definitorios, su inquebrantable voluntad, su desprecio hacia la debilidad de la carne y sobre todo su orgullo, que no le permite cejar nunca de intentar vencer. Enfrentado a los Jedi, sus enemigos más poderosos, y, para el que suscribe estas lineas, si es tan cerril contra la Orden, es más porque son el obstáculo definitivo para poder demostrar su superioridad que porque realmente esté de acuerdo con Dooku o Sidious
Y para despedir el tomo de Star Wars: La Era de la República. Villanos, se incluye el especial que contaba una historia de la Asajj Ventress post Guerras Clon, traicionada, abandonada y desprovista de recursos. Sin sus hermanas, también víctimas de las traiciones de sus supuestos maestros, camina por un nuevo camino, pero con la misma intensidad de siempre, y lo demuestra no siendo caritativa, sino enseñando lo que es el poder, para que otros no creen víctimas, para crear a otras como ella, supervivientes por encima de todo.
Star Wars: La Era de la República. Villanos es más interesante que su contrapartida de Héroes por el poco conocimiento que hay de los personajes. Pero su importancia no reside en eso únicamente, llenar los huecos puede ser divertido, pero Houser y Ross prefieren mostrar no solo esas historias, si no la psicología de todos ellos, todos del lado de Sidious, pero por diferentes razones y con diferentes objetivos. Houser sigue demostrando que le interesa añadir algo, aportar más lecturas a los personajes, y que está muy cómoda en el mundo de Star Wars.
Luke Ross que ya lleva mucho trabajo a sus espaldas, demuestra su solvencia, y de paso hace gala de su paleta de tintas oscuras para concretar el carácter de cada personaje, las sombras de Maul, el talante adusto y serio de Dooku, o el monstruo que se ha convertido en máquina de Grievous. El color de Tartaglia ayuda con tonos más apagados y con un contraste alto, estamos en el lado oscuro, la alegría no suele ser nada más que por las masacres, y en ese caso, los colores son rojos.
En definitiva, un tomo que merece la pena leer si eres fan de la saga galáctica, que no te va a revelar grandes secretos, pero te va a dejar un buen sabor de boca y te va a permitir disfrutar de los grandes olvidados de Star Wars, los que hacen héroes a los héroes y los prueban para que lleguen a ser grandes, los Villanos.