Casi 40 años después, Star Wars explica la historia de cómo Lando Calrissian acabó convirtiéndose en enemigo público del Imperio Galáctico.
La leyenda de Lando Calrissian ha sonado en toda la galaxia durante décadas, ya que él siempre le encanta recordarle a cualquiera que quiera escuchar quién es y qué es lo que ha hecho antes. Y ahora, con Star Wars firmemente bajo el control de The Walt Disney Company, esa historia finalmente se está escribiendo a partir de las viñetas de Marvel Comics y la obra titulada ‘Star Wars: Lando – Doble o Nada‘. El preludio de esta historia lo marca el personaje de Donald Glover en ‘Han Solo‘, lo que nos da una idea del hombre al que dio vida Billy Dee Williams en ‘El Imperio Contraataca‘ (1980). En aquella primera aparición se nos dijo que él era un contrabandista como Han Solo y el dueño original del Halcón Milenario, pero no ha sido hasta el número 4 del cómic actual que hemos descubierto qué fue lo que lo convirtió en uno de los mayores enemigos del Imperio Galáctico.
En ‘Star Wars: El Imperio Contraataca‘, Lando Calrissian escondió a Han Solo y compañía de la presencia de Darth Vader, mientras Luke Skywalker entrenaba con Yoda en Dagobah. Él era el supervisor de Ciudad Nube, una colonia minera de gas Tibanna que flota en las nubes del planeta Bespin y que era un buen lugar para vivir. Después de todo, era una de las pocas áreas sin el control del Imperio… O eso creíamos. Lando vendió a los rebeldes, dejando en claro que hacía lo que era mejor para su pueblo. Hasta hoy, creíamos que era un contrabandista con más o menos reputación a partir de los negocios que hacía. Sin embargo, ahora sabemos que él era el verdadero negocio, alguien con un oscuro pasado a quien el Imperio odiaba. Los fans esperaban que ‘Han Solo‘ revelara por qué se convirtió en un enemigo público, pero todo lo que el director Ron Howard mostró fue que Lando Calrissian atacaba a otros matones mediante la venta de armas y el contrabando. En otras palabras, nunca descubrimos lo que le había hecho directamente al Imperio; especialmente porque el robo del coaxium en el Corredor de Kessel nunca se remontó a él ni a Han Solo.
La revolución en Star Wars según Lando Calrissian
El número 4 de ‘Star Wars: Lando – Doble o Nada‘ revela que ha estado liberando esclavos de las distintas colonias imperiales, reduciendo así la fuerza de trabajo del Imperio Galáctico. Hasta la fecha, esta colección de cómics se había limitado a mostrarnos al personaje negro junto a su androide L3-37 (Leet) realizado «trabajillos» en los que hacen contrabando de armas en la línea de ensamblaje de droides Kullgroon para que los petrusianos puedan levantarse y derroquen a sus captores. Como le dijo a su jefe, Kristiss, solo está ahí para eso: entregar armas y cobrar. Sin embargo, cuando ella es capturada Lando Calrissian no tiene otra opción que rescatarla para cobrar su dinero.
Sin embargo, la mentalidad anti-esclavista de L3-37 se ha contagiado también en él, ya que ella cree que ningún droide o ninguna otra raza deberían ser esclavos. Lando ve a los petrusianos trabajando durísimo y, cuando le dicen que una vida como esclavos es mejor que ser enemigo del Imperio, decide tomar la iniciativa y ser el líder que les falta. Este es un cambio considerable para alguien que, usualmente, es egoísta. No obstante, aquí ya no se trata de cobrar dinero sino de dar libertad a la gente. La revolución de Lando Calrissian en Star Wars lo convierte en un personaje inadvertidamente heroico y, cuando los stormtroopers a los que ataca piden ayuda por radio, es lo que convierte al susodicho en uno de los hombres más buscados de esta galaxia muy, muy lejana.