Llega a España la serie de Kanan Jarrus, uno de los protagonistas de la serie de animación ‘Star Wars Rebels'. Kanan: El último padawan cuenta como el antiguo jedi paso a ser contrabandista, ladrón y finalmente lo que siempre fue, un rebelde.
El grupo de “Espectros” que viven en el fantasma son una familia, pero antes de que Hera, Zeb, Chopper y Ezra se unieran y lucharan por la Rebelión, Kanan se llamaba Caleb Dume, y era un jedi recién salido de la academia, un padawan, un aprendiz.
Los muchos caminos del grupo de rebeldes los lleva hasta Kaller, un planeta que sufrió las Guerras Clon, y donde la maestra jedi Depa Billaba y su alumno dirigieron al ejército de la República hasta la victoria. Kanan era ese alumno, y desde el campo de batalla hasta los barrios limítrofes de la capital, sufrió la orden 66 y la persecución de los soldados clones que lucharon con él hombro con hombro. La historia de cómo huy´, de cómo aprendió que huir es indigno, pero para sobrevivir hay que hacerlo, y también robar, y mentir, porque en el Templo Jedi no le enseñaron que la vida pudiera ser de otra forma que honorable y respetable. Le enseñaron a ser un caballero, y ahora era un forajido. Si en sus años mozos ya resultaba molesto para sus maestros, era inquieto y cuestionaba todo, su vida le convertirá en un gran forajido, un rebelde contra el Imperio. Hasta que encontró su causa y fue un rebelde en la Rebelión.
Greg Weisman nos descubre el pasado de uno de los personajes de la serie ‘Star Wars Rebels', uno de los más esperados, ya que aunque en el programa se comenta en varias ocasiones, resulta bastante misterioso. Los reproches que el Inquisidor le hizo, el nombre de su maestra, el recuerdo del templo y las enseñanzas (la insistencia en la posición 3 de lucha), pequeños detalles, pero ninguna historia. Weisman decide tomar esos detalles e incorporarlos a su historia, el rechazo y el abandono, la transformación desde un “chico” hasta un hombre, como cambia el mundo que le rodea, y tiene que adaptarse. Kanan sirve también de símil para el cambio de la galaxia, de una República, que tenía sus defectos, a un Imperio que aunque mantiene una estabilidad, abusa de su poder. Este cambio en el joven jedi le lleva a descubrir que el cambio es necesario, pero que es peligroso, y puede afectar a los que le conocieron como padawan. Una historia llena de acción, de giros sorprendentes, y de batallas espaciales, como toca en una colección de Star Wars. Y lo hace con diálogos cortos, y pequeñas sorpresas para terminar de analizar el cambio que sufre el personaje y el mundo que le rodea.
Pepe Larraz ilustra el primer arco de esta historia, y lo hace con soltura, espectacularidad y con pulso firme. Se ajusta a todo lo que Lucasfilms- Disney establece en todas sus series, tienen el universo Star Wars muy controlado y establecido, pero eso no deja que quede un cómic fresco y dinámico. Ajusta el ritmo, y cuando Kanan está en sus momentos más bajos oscurece el tono y baja la cantidad de viñetas, pero cuando hay pelea el ritmo aumenta y la velocidad que adquieren sus movimientos son increíbles. Sus personajes son muy expresivos y añaden al relato mucha capacidad de identificación para el lector, a pesar de ser una fantasía. Dentro de su arte destacaría su buen uso de sombras y negros para el comienzo de la historia, que remarca la traición y el abandono que sufre Kanan, ya sea el que sufre o el que lleva a cabo.
El segundo arco, inconcluso en el tomo, es de Jacopo Camagni. Con un trazo más difuso, pero no por ello menos claro, no desentona con el trabajo de Larraz, y continua con el estilo dinámico, y buscando que los personajes estén vivos para los lectores. Su aportación transcurre en los bajos fondos, lo que ilustra aumentando la oscuridad y los personajes indefinidos.
Kanan es un buen añadido al universo Star Wars, y da mucha profundidad al personaje de la serie, que dejaba entrever una buna historia, pero que no había sido plantada aún. A la espera de la llegada del segundo, y ultimo, tomo, tendremos que repasar la serie de animación para encontrar todos esos puntos comunes que hacen de este cómic y del programa una gran aportación para la gran obra de George Lucas, el universo Star Wars.