Crítica de The Following.
The Following, es la nueva apuesta de la cadena Fox para la temporada 2012-2013, una serie de intriga que está producida y creada por el multifacético Kevin Williamson, responsable de otras series como ‘Dawson Crece’ o ‘Crónicas Vampíricas’, además de ser el creador también de películas como ‘Scream’ o ‘The faculty’.La serie está protagonizada por dos pesos pesados del cine muy conocidos como son Kevin Bacon y James Purefoy. Se conoce que ahora que el cine no es tan rentable como lo era antes, los actores eligen la televisión como un medio para tener trabajo a largo plazo. Pero eso es sólo un apunte.
Todo comienza con el escape de prisión de Joe Carroll (Purefoy), un hombre que antaño fue profesor de literatura que se convirtió hace unos años en un asesino en serie. Obsesionado con Edgar Allan Poe, destripó a 14 estudiantes como una muestra de “arte”, es capturado por fin por el agente Ryan Hardy (Bacon) que es quien le mete en prisión, no sin antes sufrir considerables consecuencias. Cuando Carroll escapa, vuelven a avisar a Hardy para que ayude al FBI a encontrarle y volverle a meter entre rejas. Dos personas son las que particularmente están asustadas de su libertad, la ex mujer de Carroll Claire (Natalie Zea) con la cual tiene un hijo y cree que querrá verle, y la única víctima que ha logrado sobrevivir a los asesinatos de Carroll, Sara (Maggie Grace). Ambas son protegidas por la policía mientras Hardy intenta encontrar pistas que le lleven al paradero de Joe. A medida que avanza la investigación, Sara es de nuevo raptada y llevada a un viejo hostal al que acude Hardy para intentar salvarla de nuevo, la primera vez la salvó él también, pero llega demasiado tarde. Carroll ya ha matado a Sara y se entrega de nuevo a la policía, alegando que tenía que terminar la obra que no había acabado años antes. Ya en la cárcel, Carroll revela a Hardy que tiene que volver de nuevo a la acción, que Joe a estado este tiempo en la cárcel creando una red en internet de “amigos” que son asesinos en serie y que ahora muchos de ellos están siguiendo sus instrucciones, como un maestro. Le dice que Sara ha sido el detonante del héroe, lo que le tiene que hacer volver a trabajar y que juntos escribirán una historia como jamás se ha visto. Ambos habían escrito un libro en el tiempo que Carroll estaba en la cárcel. Y así, asistimos al prólogo, como dice Carroll, de la historia.
La verdad que es muy interesante esta propuesta, y los personajes de Bacon y Purefoy son bastante jugosos. Si bien es verdad que quien más jugo puede sacar de todo esto es Purefoy. Un loco maniaco obsesivo (yo junto todo) que lleva todo su potencial intelectual y artístico al campo del asesinato justificando su “trabajo” como parte de un arte. Sin remordimientos, disfrutando de lo que hace. Y justo en el lado opuesto, Bacon, el hombre atormentado, el héroe dañado y cambiado por las circunstancias de su trabajo que debe volver para detener al maníaco que creyó olvidado. Que formaba parte del pasado.
Ha obtenido unas estupendas críticas en EEUU, donde la han calificado de “excepcional”, “brillante” o “de impactante acción”. A buen seguro renovará por una segunda temporada aunque sus responsables prefieran ir con pies de plomo. Continuamente vemos grandes series canceladas en su primera temporada, así que espero que esta tenga mejor suerte y podamos disfrutar de estos dos titanes en antena por mucho tiempo, eso sí, sin desgastar la idea. Su promoción, “Incluso los asesinos en serie tienen amigos”, da pistas que veremos a muchos de ellos en acción y sabremos si el pulso y la tensión nos mantienen pegados al asiento.