Brian Michael Bendis lleva Batman a través del universo tras el hombre inmortal, Vandal Savage. Y no estará sólo ¡Green Arrow, Green Lantern, Nightwing o Jonah Hex le acompañan!
Batman es el mejor detective del mundo, y ningún misterio es demasiado difícil para él, incluso si le lleva a otros mundos, tiempos ¡o estados cuánticos! Brian Michael Bendis se acompaña de Nick Derington en una obra que recoge lo mejor de la edad de plata de Batman, en un homenaje a las reuniones del detective con sus aliados para resolver los misterios más complejos.
La historia
Un robo en Gotham lleva a Batman a perseguir al Acertijo, pero el objeto robado, esconde muchos secretos. Y solo Vandal Savage, el inmortal, sabe cómo usarlos, al menos por el momento. El mejor detective del mundo se pone en marcha, un misterio tiene que ser resuelto, y necesitará la ayuda de varios de sus compañeros, algunos nuevos como Jinny Hex, y otros muy cercanos como Nightwing. Viajes en el tiempo, a través del espacio y de estados de conciencia, no hay límites para Batman, que puede moverse tan alegremente en la frontera del salvaje oeste como en una batalla cósmica de los Green Lantern portando un anillo blanco.
Los autores
Brian Michael Bendis aterrizó en las grandes marcas de la industria tras haber completado varias obras de cine negro y policial muy potentes, Torso, Jinx, Goldfish, y de haber pergeñado con Michael Avon Oeming un mix perfecto de policíaco y superhéroes, Powers, y su primera incursión en el mejor detective del mundo creaba expectación. Pero el escritor, en lugar de buscar lo más conocido se lanza de cabeza a la locura del viaje temporal y espacial, homenajeando las épocas más extravagantes de Batman, y una cabecera que siempre se recuerda con cariño: The Brave and the Bold. Uniendo el destino del murciélago con varios aliados, desentraña el misterio poco a poco, a través de viajes y saltos cuánticos, que producen entre vergüenza y risa, permitiendo al lector dejarse llevar y disfrutar sin ambages de una obra hecha principalmente para el divertimento.
Si Bendis se divierte y busca hacer algo diferente con Batman, más allá de su serio recorrido en otros títulos, Derington no se queda atrás. Con líneas claras y muchísima luz, deja las sombras en Gotham, y casi no usa negros, dejando un contraste de luz brutal, para un personaje relacionado sempiternamente con el negro y la noche. EL dibujante aprovecha para dejar libres sus ganas de disfrutar con composiciones locas en ocasiones, pero no permitiendo jamás que se les escape su principal objetivo, contar bien la historia. Pero no dejando de lado en ningún momento mostrar mucho más que solo una investigación.
Una fantástica edición
La obra se había editado anteriormente por partes en la revista ECC que la editorial publica mensualmente. Por lo que muchos se preguntarán si merece la pena tenerla en tomo. La respuesta es sí. Porque la edición es preciosa, y porque la historia atrapa y se lee de tirón, y como bloque, su función queda un poco mermada dentro de tantas revistas en las que no ocupa toda la extensión de la publicación, y podéis adquirirlo aquí.
Bendis y Derington dejan claro que lo primero es la diversión, llevar a Batman, con su personalidad intelectual, seria y sobria, a un mundo loco y que recuerda siempre a esa edad de plata. Esa que muchos pretenden olvidar para recoger un testigo de seriedad y oscuridad que nadie ha pedido, y que ha deslucido desde el cambio de los Nuevos 52 a un universo que siempre ha sido de superhéroes, y no de sufridos héroes con vidas peores y oscuras que las que tienen todos los demás, porque ser un héroe no es algo que salga de dentro, casi parecía una condena trágica.
Te recomendamos
