Se ha estrenado Erase una vez en Hollywood de Quentin Tarantino y cuenta una historia ficticia sobre lo que le ocurrió a la actriz Sharon Tate.
ATENCIÓN SPOILERS de Erase una vez en Hollywood. El director Quentin Tarantino ha reescrito la historia a su gusto y ha cambiado los acontecimientos de aquella fatídica noche del 9 de agosto de 1969 donde Sharon Tate fue asesinada.
Para entender lo que sucedió hay que explicar primero quien era Charles Manson y la secta que controlaba llamada La Familia, tambien hay que repasar la época y lo que se denominó el fin del movimiento Hippie.
Sharon Tate era una joven actriz que estaba casada con Roman Polański, director de películas como El baile de los vampiros (1967) y La semilla del diablo (1968). Charles Manson era un actor y músico que no había tenido éxito, dentro de los círculos de Hollywood era bastante conocido y terminó creando una secta, formada por chicos y chicas jóvenes a los que influenciaba gracias a las drogas y su gran carisma.
En aquella época Charles Manson estaba obsesionado con la película de La semilla del diablo y la canción deLos Beatles titulada Helter Skelter. Una noche de verano envió a cuatro seguidores suyos de La Familia a matar al director de cine. Pero no se encontraba en su casa. En cambio si que estaba su mujer Sharon Tate y algunos invitados. Acabaron con todos ellos de una forma violente y cruel. Además la actriz estaba embarazada de 8 meses. Aquellos asesinatos fueron muy mediáticos y coincidieron con el famosos festival de Woodstock, que declinó todo en el final de la era Hippie, a la vez que empezaba la década de los años 70.
La película Erase una vez en Hollywood no cuenta así las cosas.
ATENCIÓN SPOILERS. Quentin Tarantino ha preferido reescribir la historia, algo que ya hizo con Malditos bastardos (2009). En esta ocasión Sharon Tate que está interpretada a Margot Robbie sobrevive la ataque. De hecho, ni siquiera entran a su casa. Ya que los asaltantes, que en esta ocasión son 3, porque una de ellas se arrepiente a última hora. Entran en casa de Rick Dalton, el personaje de Leonardo DiCaprio. Allí son detenidos por el propio Rick y por su amigo Cliff Booth (Brad Pitt) ayudado por su pit bull. En lo que es una de las mejores y más divertidas escenas de acción que ha rodado el director.
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