De las mentes magistrales de Grant Morrison (Crisis Final, El Multiverso) y Yanick Paquette (La Cosa del Pantano, Batman Inc.) llega el origen más provocador de Wonder Woman que hayas leído. Un relato único que rinde homenaje a su rica trayectoria.
Tras Batman, Superman y los Jóvenes Titanes, llega el momento de que los mejores autores aborden el mito de Wonder Woman desde una nueva óptica. Provocadora pero respetuosa, completamente moderna pero atemporal, esta nueva incorporación a la serie de novelas gráficas Tierra Uno de DC nos presenta el poder y el valor de Wonder Woman, la campeona de Isla Paraíso.
Grant Morrison se fija en un personaje como Wonder Woman y el resto es historia. Para la ocasión tira de la tradición más pura del personaje, con una reflexión sobre la maldad del hombre (de hecho asistimos al primer encuentro del personaje con el universo de los varones, lo que deriva en un juicio contra la princesa, hecho que articula toda la historia alrededor del mismo).
Digámoslo desde el principio: aquí encontramos a un Morrison menor, con un desarrollo bastante pobre de los personajes y en ocasiones demasiado estereotipados, lo que resta profundidad al relato. A pesar de esto, el guionista nos ofrece una historia con un ritmo trepidante y donde encontramos retazos de crítica hacia la misoginia, lo que enriquece sin lugar a dudas la (aparente) sencillez de su argumento.
Por su parte, Yanick Paquette, realiza aquí posiblemente su mejor trabajo hasta la fecha. Plasma a la perfección la belleza exuberante de todas y cada una de las amazonas que van apareciendo por estas páginas, atrapando sin remedio al lector; en definitiva: un trabajo visual exquisito; sin lugar a dudas, estamos ante uno de los más grandes artistas de los últimos años.
Para poder comprobar lo que os intento decir basta con admirar por ejemplo la recreación de Isla Paraíso: un auténtico festín visual que dejará al lector con la boca abierta.
En definitiva, en este Wonder Woman Tierra Uno encontramos un nuevo reboot muy esquemático en sus intenciones y sin grandes sorpresas en su desarrollo, lo que no quita que merezca una lectura atenta por cualquier fan del escocés.
Aún es pronto para comprobar por dónde va a tirar el amigo Morrison, pero de momento en estas páginas no encontramos al gran guionista que todo el mundo conocemos. Se lo achacaré a que estamos ante un prólogo, con lo que espero que la cosa empiece a mejorar a partir del segundo tomo…
