Tres hermanos fueron hospitalizados con complicaciones menores después de que se dejaran picar por una araña con la esperanza de convertirse en Spider-Man.
Creado por Stan Lee y Steve Ditko en 1962, Spider-Man, también conocido como Peter Parker, es retratado regularmente como un adolescente que, por los efectos de una picadura de araña radiactiva, adquiere poderes extraordinarios. Desde entonces, se ha convertido en uno de los héroes más populares de Marvel, apareciendo en cómics, series animadas, videojuegos y varias adaptaciones de películas. La historia que os dejamos a continuación es un recordatorio de la influencia que estos personajes pueden tener sobre las mentes jóvenes e impresionables.
Según el New York Post, los tres niños, de 12, 10 y 8 años, de la provincia de Chayanta en Bolivia, encontraron una araña viuda negra mientras estaban con sus cabras. Pensando que obtendrían los mismos poderes que Spider-Man, los tres muchachos molestaron la araña lo suficiente como para que todos fueran mordidos por ella.
Por suerte, la historia tiene un final feliz.
Los niños fueron encontrados por su madre, quien los llevó a un centro médico cercano para recibir tratamiento después de darse cuenta de lo que había sucedido.
Después de ser trasladados a un hospital infantil, los niños pasaron cinco días recuperándose de los efectos de la picadura y fueron dados de alta el miércoles pasado. Afortunadamente, los tres parecen estar completamente recuperados. Las viudas negras son una de las arañas más temidas del mundo y, según National Geographic, son las especies más venenosas del continente americano. Con un veneno 15 veces más potente que una serpiente de cascabel. Además los niños son particularmente vulnerables a las picaduras. Así que gracias a la rápida actuación de la madre y los sanitarios pueden conservar la vida.
Mientras Spider-Man espera para seguir sus aventuras tanto en cómics como en las películas. Así que es mejor disfrutarlo en ese formato que dejarse picar por una araña potencialmente mortal. Espero que esta historia sirva para que ningún otro niño se deje picar por una araña. Ya que puede acabar la experiencia de la peor forma posible.