Películas para la historia con frases para la posteridad. Estas 3 películas nos han dejado una huella imborrable, dándonos lecciones de la vida sólo con palabras
La historia del cine nos ha dejado obras de una calidad artística insuperable. Películas que han pasado a la posteridad no sólo por lo que muestra, sino por el modo de hacerlo. Pasa lo mismo con los grandes libros o los grandes cuadros o las grandes canciones de la humanidad. El arte no sólo es arte por el mero hecho de serlo, sino por la forma en la que se expresa. Continente y contenido, formando un todo. No se pueden entender el uno sin el otro si quieres crear una obra maestra.
Por ello hay frases para la historia. Frases de películas que son insuperables. Únicas. Perfectas. Tanto por lo que dicen como por cómo lo dicen y cuándo lo dicen. En el link que os hemos dejado podéis encontrar algunas de las más famosas. Se trata de la web Intentarlo.com, un portal que sirve en bandeja de plata momentos icónicos y legendarios del séptimo arte. Nosotros, hoy, os traemos tres películas para representar nuestros argumentos.
3- ‘El rey león’ (Rob Minkoff y Roger Allers, 1994)
Considerada la mejor película de animación de Disney Pictures, El rey león tiene un catálogo de frases para la historia. Las lecciones de Mufasa, con la voz de Constantino Romero, están inmortalizadas en las almas de más de una, dos y tres generaciones. Incluso en la piel de algunas personas. Una moraleja acerca del carpe diem, de la fidelidad a uno mismo y de la necesidad de encontrarse en un mundo que nos obliga a perdernos. La liberación individual frente a la atomización colectiva.
- Mira las estrellas. Los grandes reyes del pasado nos miran desde las estrellas. Así que, cuando te sientas solo, recuerda que esos reyes siempre estarán ahí para guiarte… Y yo también.
- Ser valiente no quiere decir que debas buscar problemas.
- Recuerda quien eres.
- Siempre que el mundo te dé la espalda, lo que tú debes hacer es darle la espalda al mundo.
- Todos estamos conectados en el gran ciclo de la vida.
- Todo lo que ves coexiste en un delicado equilibrio.
- He sentado la cabeza. Y tengo un chichón para demostrarlo.
2- ‘El Club de la Lucha’ (David Fincher, 1999)
Polémica, pero una obra perfecta en el apartado que nos ocupa. Tanto el libro de Chuck Palahniuk como la película de David Fincher nos dejan joyas sintácticas de alto calibre. Un torrente de expresividad a través de las palabras para representar el anarquismo y el odio hacia la sociedad consumista y del espectáculo occidental. Ponemos algunos ejemplos:
- Todos sabemos que se suele dañar más a la persona que quieres, pero también puede ser al revés.
- Esta es tu vida y se acaba a cada minuto.
- La publicidad nos hace desear coches y ropa. Tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual; nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seríamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock. Pero no lo seremos. Y poco a poco lo entendemos, lo que hace que estemos muy cabreados.
1- ‘El apartamento’ (Billy Wilder, 1960)
Para algunos, el mejor guion de la historia del cine. Así defienden muchos críticos El apartamento de Billy Wilder, protagonizada por Jack Lemmon. Vendida como una comedia, aunque la triste realidad es muy diferente. Como la vida misma. Porque aunque podamos poner nuestra mejor sonrisa para salir adelante, los ojos que miran al espejo revelan la verdad. La miseria, la tragedia y, sí, la comedia de nuestros días.
- ¿Cuántos días son necesarios para desintoxicarse uno de la persona que ama? Tendría que inventarse una sonda para lavar el corazón.
- Ya sabes, vivo como Robinson Crusoe: náufrago entre 8 millones de personas. Entonces, un día vi una huella en la arena, y allí estabas. Es algo maravilloso. Cena para dos.
- Si te enamoras de un casado, no te pongas rimmel.
- El espejo se ha roto. Ya lo sé, me gusta así. Así me veo tal y como me siento.
- O te buscas un coche más grande, o una chica más pequeña.
- Tengo la rara cualidad de enamorarme de quien no debo, donde no debo y cuando no debo.
