Se acaban de cumplir 25 años desde el lanzamiento de Friends, una serie que sigue conquistando a generaciones y continúa siendo un gran éxito. Con un guion y actuaciones impecables, la ficción de David Crane y Marta Kauffman es imposible de dejar de ver.
Friends, la serie que la mayoría vimos y que seguramente nos reímos con más de un episodio. Hace poco, la ficción celebró su aniversario de 25 años y llevó a cabo distintas celebraciones en diferentes partes del mundo. Porque sí, esta serie que se estrenó el 22 de septiembre de 1994, en la actualidad sigue cautivando a personas de diferentes edades.
La trama de la historia es simple y concisa. El espectador sigue la vida cotidiana de un grupo de amigos, integrado por Joey Tribbiani, Chandler Bing, Monica Geller, Phoebe Buffay, Rachel Greeny Ross Geller. En cada episodio vemos sus aventuras amorosas, sus problemas en el trabajo, los momentos más graciosos y la gran amistad que comparten.
¿Pero qué logró que Friends sea un gran éxito? Estamos hablando de serie que se completó con 236 episodios, cargados de comedia pura del cual se logró sacar provecho al máximo. Tal vez, la serie no era perfecta, pero contaba con distintos amuletos que lograban destacarla del resto.
Esta ficción, que se transmitía por NBC, era básica pero de altísima calidad. Contenía muchísimas bromas, sorpresas, comedia de gestos y hasta momento enternecedores que hacían que el público en vivo gritara de emoción. Tan grande era su repercusión, que hasta los peluqueros copiaban el estilo de Rachel, varias cafeterías querían recrear el mítico Central Perk y se convertían en un segundo hogar para la gente.
La serie se transmitió por primera vez en Estados Unidos en el canal NBC en otoño de 1994, estuvo al aire por más de una década y cada semana la serie era sintonizada entre 25 y 30 millones de televidentes.
Los amigos, la clave de la serie
En Friends la clave del éxito son los amigos. La gran presentación que todos recordamos, con la emblemática canción I’ll Be There For You de The Rembrandts, nos mostraba a un grupo de amigos divirtiéndose y siendo cómplices entre ellos. Esta introducción, era definitivamente, el gancho intangible de la serie.
La comicidad que había entre ellos y la manera en la que se apoyaban el uno al otro, estaba muy bien logrado y generaba que el espectador se creyera por completo la amistad. Cabe aclarar, que mismo los actores luego lograron forjar un gran cariño entre ellos y la amistad que se veía en pantalla terminó siendo verdadera.
La relación entre ellos era verdadera ante los ojos de los televidentes. Eran seis personas que podían gritarse, pelearse, mentirse entre sí y también decirse las verdades más incómodas, al mismo tiempo compartían secretos, complicidad y vivían los momentos más divertidos de su vida. Era una amistad común y corriente, con la que muchos podían identificarse.
Grandes actuaciones y excelente guión
Friends es lo que es, gracias a sus actores y sus creadores. La serie no sería lo mismo si no hubiese contado con Jennifer Aniston, Matthew Perry, Lisa Kudrow, Matt LeBlanc, David Schwimmery Courteney Cox. O al menos eso sentimos ahora, ya que no podríamos ver la ficción con otros actores.
Aun así, las actuaciones de cada uno de ellos es lo que provoca que los personajes sean tan reales y no solo un producto ficticio. Logran traspasar la pantalla, generado distintos sentimientos en el televidente y una gran conexión que provoca tomarles cariño. Uno pasa a sentirse que forma parte de este grupo de amigos, que es uno más de ellos.
Y con respecto al guion de Friends, este es una gran excelencia. David Crane y Marta Kauffman crearon una serie que logró traspasar generaciones, algo que no muchos proyectos obtienen con el pasar del tiempo. Además de las actuaciones y de una trama fácil de entender, el guion que llevó a cabo su creador es una de las claves de su éxito atemporal.
Todos los que vieron Friends tendrán escenas que no olvidan, que son únicas y que si las recuerdan seguramente le siguen generando risas. Es que el guion contaba con chistes fáciles, pero únicos, que contaban con el tinte de cada personaje y que lograron perdurar en el tiempo. Es más, hay muchas tramas que tienen todo una verdad detrás que no todos conocían: como la icónica escena de Ross que se equivoca de nombre en la boda, que surgió como una improvisación real del actor.
Han pasado 25 años, y Friends sigue siendo una de las mejores series que pudieron existir. Muchas personas la odian, muchos la aman, pero estamos seguros que ninguno debe perderse la oportunidad de poder ver aunque sea un episodio y conocer a este gran grupo de amigos.