Crítica de la película cómics ‘R3sacón’.
Todd Phillips parece haber cumplido con una de esas promesas que todo juerguista se hace alguna vez tras una pesada y larga resaca: no volver a los excesos que le llevaron hasta allí. En R3sacón (‘The Hangover Part III’), la manada vuelve a juntarse para vivir una aventura centrada en la sobriedad; sin drogas, sin bebida y, por tanto, sin resaca. Tampoco hay boda y la vis comica del trío Cooper-Helms-Galifianakis se disuelve en una sucesión de gags que dejan un cierto mal sabor de boca.
Para empezar, es muy recomendable volver a ver la primera entrega ya que ‘R3sacón’ remite constantemente a ella, haciendo de algunos de sus chistes incomprensibles para los primerizos en la saga de Phillips. Esta vez volveremos a Las Vegas, un intento fallido por cerrar la trilogía donde empezó todo. No resuelve nada, ni falta que hacía, y la película acaba siendo salvada por el genial Zach Galifianakis y alguna escena aislada del asiático Keng Jeong, con más protagonismo que nunca.
El principal fallo de ‘R3sacón’ es prometer lo que no da; la más espectacular de las resacas y la incorporación de John Goodman. Al final ni una gota de alcohol, ni un gramo de estupefacientes y una participación testimonial de Pedro Picapiedra. Galifianakis nos sigue haciendo reír, y mucho, con sus extravagancias y sus arrebatos por Phil (Bradley Cooper), pero el eco de la primera parte resuena tan fuerte que hace que ‘R3sacón’ acabe cayendo en los clichés con los que ya se encontró ‘Salidos de cuentas’, otra ‘road movie’ de Todd Phillips salvada por Galifianakis. Una última advertencia: no veáis el tráiler porque en él se encuentran ‘spoilereados’ los mejores golpes de la película.
Lo mejor: Galifianakis, por si todavía no ha quedado claro.
Lo peor: ni rastro de la esencia de las primeras entregas.
Nota (del 1 al 10): 5,5