Crítica de la película ‘Sicario: El día del soldado’ de Stefano Sollima.
Empecemos diciendo que ‘Sicario: El día del soldado’ es la segunda parte del ‘Sicario’ (2015) de Denis Villeneuve y de segundas partes no se puede esperar mucho. Más aún cuando la película de Villeneuve me aburrió sobremanera. Así que fui a ver esta segunda parte con las expectativas bajas, quizá fuese que el aire acondicionado estaba a tope y en la calle te derrites o quizá necesitaba un chute de adrenalina. Sea como fuere esta película que dirige Stefano Sollima me acabó gustando. El director viene de hacer televisión de la buena: Las maravillosas ‘Roma: Ciudad Criminal’ y ‘Gomorra’. Así que sabe lo que se hace. Pero si ‘Roma’ y ‘Gomorra’ nos sorprendieron por un desarrollo de personajes magnifico aquí nos encontramos solo con una secuela que se conforma con unas escenas de acción muy bien realizadas.
La secuela no aporta ni cuenta nada que no hiciera la original (la guerra por parte del gobierno estadounidense contra los carteles mexicanos), pero tampoco la desmerece. La factura técnica vuelve a ser brillante, el sonido está muy, muy trabajado. Tanto, que hacía tiempo que no salía tan sorprendido de una sala de cine.
Como contras podemos achacarle una visión simplista del conflicto entre Estados Unidos y México.
Incluso se llega a mezclar el paso de inmigrantes mexicanos por la frontera con el yihadismo (¿?). Me quedé helado al verlo, y no era el aire acondicionado. Muy feo como se plantean estos temas y más ahora con Trump de presidente. Aquí lo que importa es que los protagonistas consigan su objetivo y lo demás son daños colaterales, si tienen que morir unos cuantos mexicanos por el camino no parece importar mucho, total… Lo dicho, feo, feo. A cambio de dejar nuestros prejuicios morales a la entrada podemos ver a Benicio del Toro y a Josh Brolin pegando tiros en plan cool y eso pues… mola.
Aquí os dejamos el tráiler de ‘Sicario: El día del soldado’.
