Fue el único Bond que se casó y su esposa en la ficción fue asesinada por los enemigos del agente secreto.
George Lazenby nació el 5 septiembre 1939 en Goulburn, Australia. Hijo único de un obrero de ferrocarril, se independizará a la edad de quince años. A los diecisiete, decidió detener sus estudios y pasó cuatro meses en el ejército australiano antes de la abolición del servicio nacional obligatorio.
Aprendiz de mecánico de coches, Lazenby se dedicó a las ventas de coches y trabajó en distintos lugares de Australia. También encontró a una mujer que le robó el corazón. Ella se mudó a Inglaterra y él la rechazó abandonando su enlace amoroso.
George Lazenby alquiló una habitación en Londres y encontró trabajo en la rama que conoce mejor, la venta de coches. Admirando las nuevas limusinas de una revista de Park Lane, el fotógrafo Chard Jenkins, convence a George Lazenby para que entre en el mundo de la moda. Menos de un año más tarde, se convertiría en el modelo masculino mejor pagado no solo de Inglaterra, sino de Europa entera.
Posteriormente, en la época en la que se buscaba un nuevo James Bond, George, Lazenby viajaba en Aston Martin y ganaba poco más de 40.000 $ anuales. El periplo de Bond empezó con un simple favor: Lazenby sustituye a un amigo en un encuentro con Maggie Abbott, un agente con gran futuro.
Cuando Sean Connery abandonó el rol en 1967, Maggie Abbott persiguió a Lazenby incluso dentro de un restaurante parisino y le insistió para que se presentara a una audición. La idea le gustó, era un gran fan de James Bond. Se dirigió entonces al sastre Anthony Sinclair, donde Sean Connery se vestía, y mandó que le hicieran un traje, compró un Rolex y se cortó el pelo al estilo ‘Bond’. Una vez listo, entró en la oficina del productor y pidió ver a Harry Saltzman sin tener visita concertada. Dijo: ‘Parece que estáis buscando a James Bond’.
Los productores Albert R. Broccoli y Harry Saltzman habían examinado a más de 400 candidatos antes de contratar a un George Lazenby de 1,86m., 81 kg, y 29 años, para el papel de 007 en octubre de 1968.
Fue el único Bond que se casó y su esposa en la ficción fue asesinada por los enemigos del agente secreto. Además, en la única película que protagonizó, tuvo problemas con el director Peter Hunt, que ni siquiera hablaba directamente con él. Además, corría el rumor de su mala relación con su coprotagonista, Diana Rigg, a quien acusó de comer ajo antes de las escenas en las que debían besarse.
Cuenta la leyenda que le ofrecieron un contrato por siete películas, pero su agente lo convenció alegando que ‘la moda de James Bond acabaría pronto’.
Fue el más criticado de todos los Bonds, sólo protagonizó una película. También fue el primer actor no británico en interpretar al agente 007 en el cine, ya que era australiano. Fue el más joven en ponerse el traje de Bond, a los 29 años.