Un grupo de artistas de efectos especiales todavía se fascinan con una película de Disney que tiene más de 20 años.
En el impactante mundo de los efectos visuales, las películas CGI fotorrealistas han dejado boquiabiertos a los espectadores con su asombrosa calidad visual. Y ahora, hay una película de Disney que está siendo revisada para comprobar lo bien hecha que está a pesar de que tiene algunas tomas que se han quedado anticuadas.
Si retrocedemos en el tiempo, hace 23 años, encontramos una película llamada Dinosaurio. Estrenada en el 2000, esta historia nos sumerge en la vida de un solitario lagarto prehistórico que intenta proteger a su familia de lémures después del impacto de un asteroide. Aunque no fue un gran éxito en taquilla, con una recaudación mundial de 349 millones de dólares frente a su presupuesto de 127,5 millones de dólares, lo que realmente destaca es su animación.
Ahora han analizado bien a Dinosaurio.
En un reciente video de Corridor Crew, un equipo de artistas de VFX analiza cómo la película de Disney sentó las bases para las películas CGI fotorrealistas. Aunque señalan algunas fallas en las sombras, también elogian la impresionante animación, especialmente en el cabello y la hierba, y explican las fascinantes técnicas utilizadas por The Secret Lab. Resulta que Dinosaurio fue una combinación de CGI y tomas del mundo real utilizando tecnología de pantalla verde y otros trucos ingeniosos de animación.
El meticuloso trabajo detrás del desarrollo de Dinosaurio allanó el camino para las futuras producciones, ya que los animadores ya no tenían que partir desde cero en cada proyecto. Gracias a las técnicas perfeccionadas en la película de Disney, las producciones posteriores se beneficiaron enormemente al poder crear entornos sorprendentes y realistas con mayor facilidad.
Un ejemplo más actual.
La película de Disney que aprovechó la base establecida es el remake de El Rey León de 2019. Si bien Dinosaurio inspiró la idea de generar un mundo animado utilizando escenarios del mundo real, El Rey León llevó esta evolución un paso más allá. En lugar de superponer animación sobre entornos reales, se creó el remake de Simba y sus amigos como si fuera un videojuego, donde tanto los escenarios como los personajes eran generados por igual. A diferencia de Dinosaurio, en la que los animadores tenían que ajustarse a los entornos renderizados, El Rey León fue diseñado desde cero, lo que facilitó enormemente la producción del reinicio del clásico de animación de 1994.
En muchos sentidos, El libro de la selva de 2016 también se considera un sucesor espiritual de Dinosaurio.
En esta película de Disney, los animales fueron completamente renderizados y animados, mientras que el actor Neel Sethi interactuaba con ellos frente a una pantalla azul. Al igual que en Dinosaurio, donde las criaturas animadas se alejaban de un brazo mecánico de dinosaurio del mundo real, El libro de la selva presentó una combinación similar de acción en vivo y elementos animados. Estas producciones demuestran que la compañía ha evolucionado más allá de las estrategias utilizadas en Dinosaurio. Sin embargo, esta película sentó las bases para que pudiera construir y realizar las películas CGI fotorrealistas que disfrutamos hoy en día.
Dinosaurio se puede ver en la plataforma de streaming Disney Plus con este enlace.