Ya queda menos para el estreno de X-Men 97 el revival donde Marvel Studios recuperará una de las series de animación más icónicas de los noventa y le dará nueva vida para una nueva generación a través del streaming. Y el tiempo parecerá nunca haber pasado. Porque X-Men 97 se presenta como la continuación directa de aquella mítica serie animada por la que muchos conocimos a los mutantes y Marvel.
X-Men: La Serie Animada. Con 76 episodios repartidos en cinco temporadas. Emitida desde 1992 a 1996 se convirtió en un verdadero caldo de cultivo para una generación que creció con las aventuras televisivas de los X-Men y creó verdaderos fans. El éxito de los mutantes les permitió dar el paso a la gran pantalla. Sin miedo. Y el resto es historia. Pero la nostalgia a veces nos puede cegar.
Y es que fuimos muchos los que crecimos con la serie de los X-Men pero tal vez pasado un tiempo… Nuestra opinión sobre la serie ha cambiado bastante. ¿Merece o no merece la pena X-Men: La Serie Animada? Os invito a que lo descubráis. Porque os traigo mi particular crítica de X-Men: La Serie Animada ¿Nos ciega realmente la nostalgia?
Hablar de X-Men: La Serie Animada es como volver al pasado… A la infancia de cualquiera… A esas tardes después del cole cuando en Telecinco hacían combo con X-Men y Power Rangers. Al menos en España.
Después de pasar todo el día entre libros siempre era un alivio pensar en merendar con los mutantes y los guerreros de Zordon. A lo largo de los años la serie de animación se convirtió en un verdadero caldo de cultivo de nuevos adeptos para los X-Men. Marvel supo cuándo dar el salto definitivo a otro medio con los Hijos del Átomo y acertó de lleno.
X-Men: La Serie Animada llegó a la parrilla de la forma más inesperada. Tras algún que otro intento que no llegó a buen puerto. Finalmente. Marvel encontró en Saban Entertainment un buen aliado para levantar un proyecto como el de X-Men. El sábado 31 de octubre de 1992 empezó la emisión de X-Men: La Serie Animada. Una serie que sorprendió a propios y extraños. Y es que pese a ser una serie claramente enfocada a los niños se atrevió a tratar temas y abordarlos de una forma de lo más sorprendente además de apostar por una serialidad que creaba tramas y subtramas que iban correlacionando los episodios manteniendo enganchada a la audiencia.
Los mutantes reinaban en las listas de ventas de Marvel Comics. Convirtiéndose en un verdadero éxito millonario como nunca antes se había visto. Los creadores de la serie apostaron por crear un grupo como núcleo central que aportase miga y que a su vez sirviera para homenajear los 30 años de historias de los mutantes, comprimiendo más de tres décadas en una nueva línea que ante todo se mostró más que respetuosa con los cómics de los X-Men. En el grupo tuvimos…
De los originales se quedaron Cíclope y Jean Grey por el drama que siempre han atesorado estos dos; mientras que la Bestia se quedaría para convertirse en el cerebrito del grupo que servía para explicar un poco las rocambolescas movidas en las que se vería envuelto el grupo con viajes en el tiempo y demás fumadas.
De la Segunda Génesis se quedaron cómo no, con Lobezno y Tormenta. Mientras que Pícara y Gambito se sumaron para seguir explotando el drama. Sin olvidar a Júbilo. La joven inexperta de la época. Logrando una gran popularidad. El Profesor X completaría el equipo de X-Men convirtiéndose en el gran faro de esta odisea.
Con el núcleo reducido a los X-Men más icónicos. El resto de personajes de la franquicia mutante fueron apareciendo como cameos en episodios especiales y otros personajes del Universo Marvel.
La serie abordó temas como la xenofobia, la homofobia y cualquier fobia a otro tipo de cultura o modo de vida desde un punto de vista de ficción pero los mutantes siempre tuvieron esas doble lecturas que hablaban de una sociedad anquilosada en el pasado que no aceptaban el cambio. Pero no se olvidó de la más más aventura y de ciencia ficción que siempre han tenido los mutantes. Adaptando grandes arcos argumentales de la historia de los mutantes a la pequeña pantalla. La Saga del Fénix Oscuro. Días del Futuro Pasado. Apocalipsis. Proteo. La Falange.
Y es que al contrario que otras series de animación de la época donde los episodios casi no tenían relación entre sí. X-Men apostó por crear una gran historia río que pasaba de un episodio a otro. Llegando incluso a crear arcos argumentales con más de cinco episodios. Convirtiendo cada temporada en una unidad con principio, nudo y desenlace. Desarrolló complejos arcos argumentales y tramas que iban retomándose de una temporada a otra. X-Men requería compromiso.
Pero hay que reconocer que fue una serie que fue de más a menos. Porque el peak de X-Men: La Serie Animada fue durante la tercera temporada donde adaptaron La Saga del Fénix Oscura. Ofreciendo uno de los arcos más dramáticos de los X-Men y lo bordaron con los elementos con lo que contaban.
Uno de los elementos por los que más destacó la serie sobre todo fue por su lado más culebrones. Algo inherente en el ADN de los mutantes. Y que respetaron en la serie. Creando triángulos amorosos entre Cíclope, Jean Grey y Lobezno. Poniendo más drama a la relación imposible entre Pícara y Gambito. Pero el resto de personajes no se quedaron atrás.
Todos ellos fueron protagonistas de diferentes arcos argumentales que siempre traían de vuelta a algún viejo conocido de los X-Men. Ya fuera Coloso, Rondador Nocturno, el Hombre de Hielo, el Ángel, las historias del pasado de Lobezno, las fumadas de Mojo…
Los creadores supieron entonar muy bien la personalidad de los personajes y supieron sacar oro de sus interacciones. Tormenta se mostró como una indispensable de los X-Men. Júbilo cayó en gracia porque por la época se había convertido en la nueva Kitty Pryde. Esa joven mutante que empezaba a descubrir el nuevo mundo que le esperaba con la Mansión Xavier. Todos los personajes tuvieron su momento de oro con mayor o menor fortuna. Por supuesto. Magneto y su Hermandad de Mutantes Diabólicos estuvieron muy presentes.
Pero al basarse en su mayoría en los arcos argumentales más noventeros la serie decidió presentar personajes como Cable o Bishop para justificar las movidas espacio temporales que se montaron en la serie.
Mr. Siniestro. Mística. Juggernaut. El Frente de Liberación Mutante. Los Centinelas. Nimrod. El Club Fuego Infernal. Los Morlocks. Genosha. La Tierra Salvaje. El Rey Sombra. Alpha Flight. Los Shi’ar. Y un largo etcétera. Los villanos de los mutantes no se quedaron atrás y se las hicieron pasar canutas a lo largo de los cinco años de emisión de la serie. Y aunque la censura y la violencia no permitieron explotar el dramatismo hasta sus últimas consecuencias lograron estar más que a la altura.
Los villanos al igual que los héroes estuvieron muy bien trasladados y aunque hubo alguno que otro que brilló más de la cuenta a todos les hicieron justicia y honor.
X-Men supo captar a la perfección el espíritu de los mutantes y lo extrapola al medio de una forma asombrosamente fiel a pesar de los muchos años de continuidad que tienen a sus espaldas. Y es que no es moco de pavo sintetizar tanta historia mutante. Una de las grandes virtudes de la serie es que mantuvo enganchada a la audiencia y pronto se vio como otras productoras intentaron seguirle el ritmo.
X-Men empezó como una producción modesta y pronto se sumaría Toy Biz a la ecuación cuando empezaron a vender una línea de juguetes de los X-Men. No pasó mucho tiempo para que los X-Men se convirtieran en iconos de la cultura popular. Fueron muchas generaciones las que crecieron con las grandes batallas entre los X-Men y el villano semanal de turno. Pero siempre hay un gran pero. Y es que la animación con la que se contó tal vez no fue la más refinada.
Mientras revisionaba la serie para ponerme al día para X-Men 97 se me hizo cuesta arriba una vez llegamos a la cuarta temporada.
La primera temporada fue concebida como una prueba piloto que fue de lo más acertada concluyendo en esa versión apócrifa de Días del Futuro Pasado incluyendo a Cable y demás movidas. La segunda temporada fue la prueba de fuego. Y a partir de la tercera temporada tuvieron vía libre para hacer verdadera magia. Sin embargo se nota que a partir de la cuarta temporada hubo cierto bajonazo a pesar de tener episodios autoconclusivos brillantes. ¿Y qué decir de la quinta temporada? Donde las costuras eran más que evidentes.
La serie contó con la supervisión de Bob Harras de Marvel Comics y también con algunos míticos guionistas como Lein Wein el creador de Lobezno. Por poner un ejemplo, adaptaron un sin fin de historias de la mitología de los mutantes, grupos y personajes en una coctelera única e irrepetible.
Pero hay que reconocer que la animación ha envejecido muy mal y es que se nota que el presupuesto tampoco acompañaba con esta producción y no fue por falta de ganas por parte de Marvel de vender la licencia de los X-Men y llevarla a otros medios.
Con X-Men: La Serie Animada y Spider-Man: La Serie Animada empezó a apuntalarse una nueva generación de fasn de Marvel acabarían más pronto que tarde con un cómic en las manos o viendo las primeras películas con las que se dio comienzo la nueva era dorada de los superhéroes en el cine a principios de los 2000.
Supieron conjugar muy bien todos los elementos que han hecho únicos a los X-Men. Pero no es una serie tampoco para todos los estómagos y es que el tiempo no le ha perdonado y hay que reconocer que ha envejecido muy mal. La nostalgia nos ciega totalmente. Y aunque flipamos con la cabecera. También hay que reconocer las sombras de una serie que nos acompañó durante tanto tiempo y a los que muchos le debemos nuestra afición. Honestamente no es una serie que recomendaría ver a nadie si no está muy bien mentalizado de lo que va a encontrarse.
X-Men: La Serie Animada estuvo bien en cuanto a lo narrativo y argumental pero falla estrepitosamente en la animación pese a que las primeras temporadas aún podían salvarse. Al final X-Men con el paso del tiempo se ha convertido en una serie recomendada para muy cafeteros. Para muy fans de los X-Men. Avanzada en su época.
Nos dejó con un agridulce final donde Xavier partía al Mundo Trono Shi’ar dejando a los X-Men a su suerte.
X-Men 97 recuperará el espíritu de la serie original convirtiéndose en una continuación que seguro no nos obligará a ver la clásica ni mucho menos pero ya a primera vista se nota que han actualizado el estilo de animación. Otro totalmente diferente a What If…? y honestamente lo prefiero ya que al fin y al cabo lo que pretenden aquí es también llevarnos al pasado a través de regresar a una de las series de nuestra infancia.
¿Vosotros qué recuerdo guardáis de X-Men: La Serie Animada? ¿La habéis vuelto a ver desde que erais pequeños? ¿Os enganchó a los X-Men? ¿Luego visteis las pelis? ¿Empezasteis a leer cómics de los X-Men? ¡Nos leemos en los comentarios!
Puedes ver a continuación un pequeño featurette de X-Men 97 que se estrenará el próximo 20 de marzo en Disney +. Suscríbete en este enlace para no perderte ningún episodio.
